Desde los 17 años Renata ha luchado por consolidar su identidad. Hoy, con 31 años por fin  pudo obtener su acta de nacimiento en el Registro Civil del municipio de Juan C. Bonilla y así tramitar su credencial del Instituto Nacional Electoral, con lo que se convirtió en la primera mujer transexual en la historia de Puebla en realizar con éxito los trámites.

"No fue sencillo. Desde los 17 años estoy luchando con esto”, dice Renata, nombre que utilizaremos para proteger su identidad,  quien lleva ya más de diez años en tratamiento hormonal y en 2007 se practicó en Vancouver, Canadá una cirugía de reasignación de sexo.

Viví seis meses allá. Las autoridades migratorias eran de lo más incluyentes, respetuosas. No había discriminación. En Canadá no había problema, la gente está muy sensibilizada. Fue un largo proceso en consolidar mi identidad pero cuando llego a México, a Puebla, las condiciones eran otras. No tenía documentos que avalaran mi identidad”.

Como persona transexual, Renata no podía rentar un departamento, ni conseguir un crédito bancario o solicitar servicios que requerían de documentación, puesto que aún en los registros aparecía con su identidad masculina.

Me daba mucha pena. Llegué a tramitar la renta de un departamento pero cuando vieron mis documentos que solicitaban hasta me regresaron el dinero del depósito. Entonces pedía que mi familia, que mi madre apareciera como titular de la renta, pero tampoco me dejaban. Era muy complicado. ¿Pedir una tarjeta de crédito? No, ni loca. No se podía. Sufría mucho. Me exhibían, me señalaban si veían mis documentos originales”.

El 14 de noviembre del 2014 la Asamblea Legislativa del Distrito Federal aprobó que en la capital del país pudieran realizarse actas de nacimiento para las personas transgénero y así tener la posibilidad de utilizar su nueva identidad. Precisamente Renata Aguilar revisó el procedimiento y de la mano de sus abogados emprendió la tarea de su registro.

Yo primero me registré. Este trámite lo empecé en marzo y después nos citaron hasta abril. Tardaron como un mes en darme cita. Y quince días después pudimos recoger el acta de nacimiento en el Distrito Federal. La fila era enorme. Quedó asentada ya en el mes de mayo”, recuerda.

Según explica, para que pudiera consolidar el trámite y obtener su credencial para votar del INE se aventuró a realizar el procedimiento para que el registro del Distrito Federal quedara asentado en Juan C. Bonilla, el lugar donde originalmente nació.

Cuando me entregaron el acta en DF inicié el procedimiento para que me dieran de alta en el Registro Civil en Juan C. Bonilla, pero no querían. Tuvo que intervenir mi abogado. Las autoridades son muy cerradas. Muy ignorantes, como si lo que estuvieran haciendo fuera un delito. Entonces no procedió. Fue hasta que mis abogados confirmaron que el procedimiento estaba bien realizado que me dieron el acta”.

Los abogados del bufete jurídico Moreno Flores y Asociados apoyaron a Renata en el proceso. En el procedimiento únicamente se hizo una corrección de acta de nacimiento donde se cambia género y nombre que se inscribe en el Registro Civil de donde nació la persona interesada en el cambio, en este caso en Juan C. Bonilla. En los libros quedan registradas las adecuaciones al margen y así es como puede concederse el acta de nacimiento.

Ya con mi acta sin ningún problema pude tener mi credencial del INE. Fuimos a San Pedro Cholula para que me la dieran. Ya me la entregaron. Estoy feliz, imagínate. Al fin de cuentas ya tienes tu documento que te acredite. Sin tener que andar pidiendo ni con la vergüenza de qué van a decir”.  

Prácticamente la vida de Renata se ha consolidado con la identidad que siempre quiso y anheló. “Hoy soy una persona completa. Y pues tengo los documentos que lo avalan. Jamás pensé en lograrlo. Es otra victoria para mí”, asegura.