La obsesión por fotografiar cada uno de los instantes de nuestras vidas, así estemos haciendo nada con ellas, está llegando a un punto inverosímil.

Tal es el caso de Teriq Royal quien recibió un disparo con un “cuerno de chivo” por lo que se hizo una selfie y grabó un video para registrar el momento. En el breve video colgado en YouTube se observa al rapero cubierto de sangre.

Tan pronto como terminó de grabar el video fue llevado al hospital donde le detectaron tres fragmentos de bala alojados en el cráneo.

El artista de la ciudad de Compton dijo sentirse bendecido por “poder ver otro día y rapear al respecto”.

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