En Puebla ya hay un promotor de Traffic Light. Se trata del empresario marinista, Édgar Nava, quien luego de ser descubierto promoviendo a su propia empresa, Vital-Led Iluminación, tuvo la idea, ya que le sabía al negocio, de ser intermediario.

Lo hizo porque sabe que está completamente vetado de la administración estatal y de muchas municipales, por su relación con el exgobernador de Puebla.

¿Cómo logró entrar?

Por su excelente relación con el operador del gobierno interino de Guillermo Pacheco.

Recordemos que fue él quien favoreció a Nava con el contrato para la reconstrucción de las laterales de la Recta a Cholula, una obra que estimada en 77 millones de pesos, y que fue detenida en cuanto Miguel Barbosa llegó al poder.

Pues resulta que la dupla entre Nava y el operador de Guillermo Pacheco, a quienes todos conocemos, sigue usando el discurso de su relación con el gobierno de Miguel Barbosa. Una completa mentira.

Así, han promovido para que Traffic Light se quede con las concesiones de alumbrado en los municipios de Puebla. Ellos les dicen a los alcaldes que es una instrucción directa del 01, como llaman al gobernador los funcionarios estatales.

Esto coincide con la reciente entrega de las licitaciones de alumbrado que entregaron los ayuntamientos de Puebla y San Andrés Cholula a esta empresa.

Si lo hicieron porque Nava les fue a decir que “era una instrucción de arriba”, dejen les dijo que les vieron la cara.

Pero todavía están a tiempo de salvarse otros alcaldes que ya han recibido la visita del empresario y que aún pueden rectificar.

¡No hay instrucción de nadie, menos del gobernador, para contratar a Traffic Light!

Revocación de Mandato

La consulta para la Revocación de Mandato no logró el interés que buscaba por parte de los Mexicanos. Pero tampoco podemos decir que es un fracaso para Andrés Manuel López Obrador.

¿Por qué? Porque los mexicanos bien pudieron haber salido en forma masiva a exigir la salida anticipada del presidente, y no lo hicieron.

Fracasó porque se trataba de echarle porras, porque quienes la promovieron lo hicieron de forma positiva, para refrendar la permanencia del presidente y la verdad es que el discurso complaciente no anima a nadie.

En Puebla, con el 41% de las casillas computadas, sumaban ya poco más de 300 mil pesos.

Esperan, los operadores, terminar con 830 mil votos, si es así tendrán el 21% del padrón electoral y será más que suficiente porque habrán superado la media nacional, del 18%.

De todas maneras, aún cuando Puebla aportara todo su padrón, a nivel nacional el porcentaje es tan bajo que la consulta queda invalidada.