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Panzones, muñecas y mulas: regresa la fiesta de Corpus Christi al Parián

La fiesta de los panzones, muñecas y mulas volvió al Parián y el Barrio del Artista. - Diseño: Ángeles Pérez

Así se vivió el primer día de esta celebración católica en el Centro Histórico de la ciudad de Puebla

Por Carmen González / @carmenldn /

La fiesta y el color vuelven a la zona de El Parián y el Barrio del Artista con la celebración del jueves de Corpus Christi en Puebla. Después de un año, volvemos a ver las mulas, muñecas y panzones que tanto caracterizan esta tradición mexicana.

Decenas de personas mostraron su entusiasmo por volver al barrio a comprar sus “Manueles” y “Mulitas” hechos a mano, muchos de ellos por adultos mayores que a través de las artesanías reviven su propia historia familiar.

Tal es el caso de don Héctor, que fielmente asiste cada año para mantener viva esta costumbre que le fue inculcada por sus padres.

Mi papá nos traía, no acomodaba nuestro caballo, nuestra espada y comíamos chalupitas. Yo vengo y compro mi muñeca para que no se pierda esta tradición”, dijo emocionado.

 

La verbena popular comenzó a partir del mediodía y los poblanos no perdieron el tiempo: comieron chalupas, compraron pan de fiesta e incluso aglomeraron los puestos de artesanías para llevarse su panzón.

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Micaela Hernández se fue muy contenta a casa después de comprar un panzón vestido de traje de charro color café, abundante bigote y ojos verdes por tan solo 60 pesos.

Sobre los panzones, se dice que las figuras son la representación de los patrones ricos de las haciendas vestidos de charros y con sombreros anchos, como un tipo de burla por parte de sus trabajadores.

Las muñecas exageradamente pintadas son las mujeres de la aristocracia del siglo XIX.

Las mulitas son la representación de una antigua leyenda indígena referencia de campesinos que hacían ofrendas con frutas y verduras, productos transportados en mulas de carga.

 

 

Sin embargo, el número de vendedores disminuyó este año para evitar aglomeraciones y mantener la sana distancia, según las medidas implementadas por el Gobierno del Estado.

A pesar de la compleja situación que viven los comerciantes, decidieron mantener los precios de 2019, con figuras que van desde los 15 hasta los 250 pesos, dependiendo el tamaño.

Esperan altas ventas esta temporada

Bety lleva cerca de 30 años trabajando en el negocio y este 2021 lograron instalar su pequeño local de panzones en la esquina de la 4 Oriente y 6 Norte, donde espera que este año las ventas sean altas para recuperar las pérdidas que tuvieron en 2020.

Algunas de estas piezas fueron hechas en Puebla y otras traídas desde Celaya, Guanajuato.

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La comerciante relató que este año hay muy pocos vendedores de muñecas y panzones, debido a que las autoridades les notificaron con poca anticipación sobre los permisos de venta que otorgarían para que puedan instalarse este jueves y viernes.

Muchos no lograron reunir la mercancía necesaria para abastecerse; otros no tenían dinero para invertir y los foráneos no contaban con lo necesario para viajar a Puebla.

Hay poca gente, pero sí están comprando; como el año pasado no venimos, pues ahora sí está saliendo la venta. Hay gente que sigue comprando para mantener viva la tradición. Habemos muy pocos vendedores de muñecos porque nos avisaron apenas y a muchos no les da tiempo comprar su mercancía en tan poco tiempo, sobre todo a unos compañeros que vienen desde Celaya, Guanajuato. A algunos les avisaron el martes en la madrugada, cargaron su camioneta con lo poco que tenían y vinieron a probar suerte a Puebla, pero a otros no les dio tiempo”.

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