Estos son los placeres de la vida. Un perrito ciego llamado “Stevie” vivió una de las experiencias más bonitas de su vida al visitar el mar y disfrutarlo, a pesar de no poder ver.
La dueña del tierno Border Collie, una veterinaria de 25 años, grabó el momento cuando “Stevie” pisa por primera vez la arena y se acerca poco a poco al agua, donde comienza a jugar y brincar de felicidad.
A pesar de su condición, el perrito tiene bien despiertos los sentidos y es una muestra más del increíble poder de asombro de los seres vivos al descubrir algo nuevo.
¡Qué bonito día en la playa!