Seis años y 11 meses es el tiempo que la Ley Agnes ha estado en la congeladora del Congreso de Puebla, a través de cinco iniciativas que han generado escarcha en Legislativo. Sin embargo, será en los próximos días cuando los diputados de la actual legislatura tendrán la obligación de saldar esta deuda histórica a favor del cambio de identidad de las personas transgénero.
Desde el gobierno de Rafael Moreno Valle, tres Legislaturas han transcurrido sin asomarse a los derechos de las personas trans. Han sido seis años y 11 meses de constantes protestas de organizaciones civiles y colectivos de la comunidad LGBTTTIQ y feministas.
Esta lucha por reconocer la nueva identidad de género en documentos oficiales inició en la LVIII Legislatura, en el año de 2013, cuando organizaciones civiles presentaron tras varios análisis, lo que ahora se conoce como la Ley Agnes.
Su denominación fue en honor a la activista trans Agnes Torres, oriunda de Tehuacán y a quien el Estado poblano le negó su identidad, y a raíz de eso inició con investigaciones para concretar el cambio de identidad en Puebla. Fue asesinada en marzo del 2012. Su presunto homicida intelectual, Jorge F. Z., aún no tiene sentencia.
Agnes Torres ha vivido dentro de esta iniciativa que ha sido impulsada en cinco ocasiones, mediante reformas distintas al Código Civil durante todos estos años. Las últimas dos propuestas fueron presentadas por Morena, tras presiones de las organizaciones de la comunidad gay.
VER: Ley Agnes a un paso de ser una realidad en Puebla: es aprobada en comisiones del Congreso Local
El camino de la Ley Agnes
Fue en marzo del 2013 cuando las organizaciones no gubernamentales la presentaron al Congreso local por primera vez. En marzo del 2016, la diputada Socorro Quezada Tiempo hizo lo propio y
y será a unos días de que inicie marzo, cuando ocurra su posible aprobación en el Pleno del Congreso.
VER: Puebla, entre los 19 estados retrogradas en donde se ha ignorado la Ley Agnes
La propia Agnes Torres trabajó en la primera propuesta con el apoyo de diversas organizaciones civiles de Puebla. Para elaborarla tomó como ejemplo el Código Civil de la ahora Ciudad de México, que sí permite la modificación del acta de nacimiento y en consecuencia otros documentos.
Sin embargo, el desarrollo de su iniciativa quedó paralizado cuando fue asesinada el 9 de marzo, lo que provocó una fuerte indignación a nivel nacional, obligando al Congreso de Puebla a modificar el Código Penal para incluir el crimen de odio por preferencias sexuales como homicidio calificado, lo que significó un paso a favor de los derechos de las personas trans.
Fue hasta marzo del 2013 cuando colectivos presentaron la iniciativa para el cambio de identidad ante la LVIII Legislatura. No obstante, de inmediato recibieron el silencio de los diputados, por lo que quedó en la congeladora.
VER: Identidad, derecho y un mejor mañana: la esperanza de la Ley Agnes en Puebla
😰 ¡Se las debemos! La #LeyAgnes 🏳⚧ ha estado en la congeladora del @CongresoPue por casi 7 años, la cual le daría validez oficial al nombre y el género con la que las personas se definen.
— Periódico Central (@CentralPuebla) February 22, 2021
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Socorro Quezada, primera diputada que presentó la Ley Agnes
Tuvieron que pasar tres años para que, en 2016, la entonces diputada del PRD Socorro Quezada Tiempo presentara formalmente la ley, aunque de nuevo, no hubo respuesta por considerar que habían temas “más urgentes” en la agenda.
Para entonces, la Legislatura de mayoría panista se negaba a reconocer los derechos de la comunidad LGBTTTIQ pues también tenían congelada la reforma para permitir el matrimonio igualitario, que apenas en 2020 fue avalada.
VER: Presenta Socorro Quezada Ley Agnes en el Congreso de Puebla
Presentan tercera versión en 2019; se repite el silencio
En marzo del 2019, el diputado de la actual legislatura, José Juan Espinosa presentó su versión de la Ley Agnes con cinco reformas al Código Civil, siendo similar a la de Socorro Quezada.
Las organizaciones civiles pensaron que por fin sería aprobada con un partido como Morena, que, al decirse progresista, tomaría todos los pendientes que las facciones de derecha no quisieron resolver.
Sin embargo, la desilusión vino cuando nuevamente la iniciativa fue enviada a la congeladora, en el Congreso.
Fue el hartazgo de las viejas prácticas, lo que obligó a jóvenes feministas a tomar el Congreso el 24 de noviembre de 2020, tras un año de haber sido ignoradas para aprobar la Ley Agnes y la interrupción legal del embarazo. Esto, luego de que una cuarta iniciativa fue enviada a la congeladora, esta vez presentada en julio por la morenista Estefanía Rodríguez Sandoval.
Se espera que durante la última semana de febrero la Ley Agnes pase al Pleno y finalmente sea aprobada tras casi siete años de lucha, aunque habrá resistencia de los legisladores del Partido Acción Nacional (PAN).
VER: Minuto a Minuto: Feministas toman la sede del Congreso de Puebla