Hace 49 años, los poblanos no imaginaban que el apocalipsis iba a llegar por medio de una pandemia, y como no existía el peligro de un rebrote por contagios de coronavirus, los niños salían a las calles sin cubrebocas, para pedir por su calaverita.
En una foto publicada en el periódico El Sol de Puebla el 22 de octubre de 1971, se observa a Juan Antonio López, David Ruiz Cazares e Ignacio, tres niños que recorrían las calles céntricas de la Angelópolis con un muñeco que disfrazaron de calavera para juntar dinero en la temporada de Día de Muertos.
Por supuesto, en aquellos años no había tantos carros, ni tanta gente e inseguridad, tanto que los niños podían salir solos a la calle. Y era más fácil pedir calaverita entre los vecinos, porque muchos de ellos se conocían y no eran tan populares los disfraces ni disfrazarse.
Ahora, la transculturación que se ha vivido en nuestro país ha hecho que adoptemos algunos rasgos de otras culturas, como el disfrazarnos.
En un recorrido que hizo RAYAS por la tienda de disfraces “La Oveja Negra”observó que el atuendo más popular para esta temporada es el del “Doctor de la Peste Negra”, galenos que en los siglos XVII y XVIII atendieron a las personas enfermas por la bacteria Yersinia pestis.
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Además, esta revista electrónica notó que el pasado 24 de octubre se registró una gran actividad en la tienda de disfraces “La Oveja Negra”, y en la zona de La Victoria, situación que pone en riesgo a los poblanos ante un posible rebrote de contagios por coronavirus.
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