En Puebla, durante el 2019 fueron víctimas del delito dos de cada ocho poblanos, además, las dos terceras partes de los ilícitos se cometieron con portación de arma de fuego, indican los resultados de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2020, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
La encuesta publicada este 10 de diciembre retoma datos de los hechos delictivos que se perpetraron en 2019, resalta que de 4 millones 486 mil 566 personas mayores de 18 años en la entidad, un millón 138 mil 713 fueron víctimas de algún delito, es decir, el 25% del total de la población.
De acuerdo con los datos del INEGI, consultados por #DandoData, se declararon un millón 425 mil 267 delitos, de los que fueron víctimas 763 mil 141 hombres y 662 mil 126 mujeres, no obstante, sólo se denunciaron 214 mil 833 ilícitos, es decir, el 14% del total.
Ante la prevalencia de hechos de inseguridad, los costos por la comisión de delitos en Puebla se calcularon en 12 mil 155 millones 736 mil 366 pesos a nivel estatal, pues el 84% de las víctimas registraron algún tipo de daño, ya sea económico, emocional, físico o laboral que repercutió en la pérdida de recursos.
Cifra negra es del 91%
Los delitos que toma en cuenta el Instituto Nacional de Estadística y Geografía son superiores a los declarados por instituciones como el Sistema Nacional de Seguridad Pública, pero esto se debe a que la cifra negra de los ilícitos que no se denuncia, es del 91% en el estado.
De hecho, Puebla no es la única entidad que se encuentra por arriba del 90% en cifra negra de denuncias, pues el resto de las entidades se ubican en estos niveles de falta de denuncia.
De un millón 266 mil 348 delitos no denunciados, el 64% que corresponden a 817 mil 82 ilícitos no reportados por causas atribuibles a la autoridad, donde las personas no acudieron a las instancias por miedo a que las extorsionen, por pérdida de tiempo, desconfianza en la autoridad y por la actitud hostil de los servidores públicos.
En el mismo sentido, el INEGI indica que quienes denunciaron el delito del que fueron víctimas, se llevaron más de cuatro horas en ser atendidos, esto le sucedió al 40% de quienes acudieron a instancias jurisdiccionales; en un promedio de tres a cuatro horas fueron atendidos el 24%; de una a dos horas el 25% y en menos de una hora el 6%.
La mayoría de las personas que denunciaron señalaron que el trato recibido fue bueno, de hecho, el 39% de las personas que lo evaluaron así, otro 39% consideró que fue malo, el 19% expuso que fue muy malo, y únicamente el 2% lo calificó como excelente.
