El 83% de los abortos en Puebla se archivan en los expedientes sin precisar la causa, esto se debe a que los médicos que atienden a las mujeres que interrumpen su embarazo prefieren evitar responsabilidades jurídicas, tanto para ellos como para las pacientes que necesitan atención cuando llegan a hospitales y clínicas públicas.
#DandoData solicitó a través de la Plataforma Nacional de Transparencia el desglose de los abortos efectuados en la Secretaría de Salud y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Puebla, así como las causas por las que se realizó la interrupción del embarazo, que está penada en la entidad y amerita hasta un año de prisión para las mujeres.
En respuesta, la Secretaría de Salud estatal informó que se realizaron 33 mil 799 abortos de 2015 a agosto de 2020, mientras, el IMSS en Puebla realizó 10 mil 810 más en el mismo periodo. De los 44 mil 609 efectuados en ambas instituciones, en 36 mil 937 no se precisa la causa, es decir, en el 83% del total.
Un especialista de la Secretaría de Salud estatal que pidió el anonimato, explicó a este medio que la mayoría de las pacientes a las que se les atiende por aborto llegan después de haber ingerido medicamentos, “brebajes”, o haber recurrido a otro método para interrumpir su embarazo, por lo que los médicos únicamente concluyen la extracción del producto o tejidos para garantizar la salud de la paciente, sin que se le notifique a un Ministerio Público para que sea procesada.
Abortos inducidos que no se castigan, con apoyo de los médicos
El especialista precisó que varias mujeres toman Misoprostol y cuando empiezan con malestares acuden al hospital para ser atendidas, pero ya están en proceso de aborto y únicamente se les auxilia a terminar la interrupción del embarazo.
Detalló que, usualmente, los obstetras tienen dos empleos, por lo que muchos de ellos prefieren evitar darle aviso al área de Trabajo Social y al Ministerio Público cuando detectan que una mujer provocó la interrupción de su embarazo, por ello, se le atiende y se clasifica como “otro aborto” o “aborto no especificado”, con ello, ninguna de las partes tiene responsabilidades jurídicas.
Además, precisó que, pese a esta omisión, difícilmente se puede demostrar lo contrario a lo asentado en las actas médicas, ya que la atención siempre la brinda un especialista. Destacó que los datos se precisan con mayor rigor en menores de edad, ante posibles casos de abuso sexual o que sean víctimas de otros delitos.
De los 33 mil 799 abortos realizados en la Secretaría de Salud del 2015, y hasta agosto del 2020, en 27 mil 151 no se precisó la causa de la interrupción del embarazo. En cuanto las cifras anuales, destaca que en 2015 se efectuaron 6 mil 678 intervenciones y para 2019 la cifra pasó a 5 mil 430, es decir, una reducción de 18% en un lustro.
En respuesta a la solicitud de información con folio 02031920, la Secretaría de Salud estatal detalló que se practicaron 4 mil 866 abortos por alguna enfermedad que ponía en riesgo la vida de la madre o el producto; o bien, el embarazo no se desarrollaba de manera normal, era ectópico, ovárico o abdominal.
Asimismo, la dependencia expuso que se realizaron 20 “abortos médicos”, definidos por la Organización Mundial de la Salud como aquellos que se realizan a partir de la ingesta de fármacos recetados. El resto de las intervenciones se clasificaron como aborto retenido, espontáneo o médico.
En tanto, en el IMSS se practicaron 10 mil 810 abortos, de los que 9 mil 786 no se precisó la causa. Además, la cifra en general también registró un descenso, ya que en 2015 se contabilizaron 2 mil 960 interrupciones del embarazo y para el 2019 sumaron mil 674, lo que representa una disminución de 43% en cinco años.
La respuesta a la solicitud de información 0064102616920 también se indica que en 772 casos el aborto fue retenido, es decir, cuando el feto muere al interior del útero, pero no es expulsado; 200 abortos fueron médicos por complicaciones del embarazo y 50 fueron espontáneos.
