Puebla vivió y coreó la música de una de las artistas mexicanas con mayor éxito en el país; hablamos de Ximena Sariñana, quien llegó presentando su más reciente álbum “¿Dónde bailarán las niñas?”.
¿Qué tiene?
Si no sé bailar,
¿Qué tiene?
Si no tengo flow,
¿Qué tiene?
¿Qué tiene?
¿Qué tiene?
Estas fueron las primeras letras que el público poblano fue capaz de escuchar, después de que Ximena Sariñana pisara el Auditorio del Complejo Cultural Universitario este 24 de mayo.
Después de interpretar el tema “No sé”, la cantante recibió con mucho cariño y una gran sonrisa a los cientos de fans que decidieron acompañarla durante esta noche.
“Qué tal mi Puebla adorada? bienvenidos a esta noche de ¿Dónde bailarán las niñas? Espero que se la pasen muy bien. Esta noche habrá un poquito de todo, cosas nuevas, cosas viejas y pues muchas gracias a todos por venir”, dijo.
“La vida no es fácil” fue una de las canciones con la que Ximena explotó su talento y demostró que puede cantar, bailar y tocar el teclado al mismo tiempo. Luego dio paso a “Si tú no estás”, uno de sus más recientes éxitos.
“Este disco está inspirado por toda las relaciones que he tenido con las mujeres cercanas a mi vida, por eso se llama ¿Dónde bailarán las niñas? y la escribí con una súper amiga mía, la canción se llama Pueblo Abandonado”, lo que animó bastante al público.
La nostalgia llegó con “Todo en mi vida” cuya letra habla de una relación que surge de la nada y sin darse cuenta, pero con el tiempo, todo comienza a tomar forma, mientras el amor crece y crece.
De repente las luces se apagaron y Ximena paró el concierto repentinamente. Tan solo un par de minutos después, brindó una breve explicación a todos:
“Resulta que el día de la firma de autógrafos, un chico se acercó a mí y me contó una historia de amor muy bonita y quiero que por favor suba al escenario junto con su novia”.
Los novios muy nerviosos se pararon junto a la cantante y fue entonces que el chico tomó el micrófono para pedirle matrimonio. Claro que el público no dudó en aplaudir y felicitar a la pareja que desde ese momento quedaron comprometidos.
Al final, Sariñana les dedicó uno de los temas más románticos de su repertorio: "Huellas".
“Cobarde” fue la interpretación más sentimental de la noche, al terminar la letra diciendo “es culpa de quien se enamora”. A su setlist se añadió “Que seas tú” que con un ritmo bastante pegajoso, provocó los gritos y aplausos de su fans.
El clásico “No vuelvo más” recordó los inicios de la artista a finales de los 2000. La magia vino después de esto, cuando de repente, al sonar “Lo bailado nadie te lo quita”, la gente se paró de sus asientos y comenzaron a bailar al ritmo tropical de los bongos y la batería.
“Mis sentimientos” puso eufóricos a los asistentes y saltaron inmediatamente de las butacas, coreando a segunda voz esta cumbia de Los Ángeles Azules y que dejó a muchos sorprendidos, después de que Ximena no parara de mover las caderas y los hombros mientras cantaba.
Ya para cerrar la noche y después de las muchas muestras de agradecimiento por formar parte de una noche llena de diversión, Ximena Sariñana se despidió de Puebla interpretando “Vidas paralelas” al ritmo de un beat electrónico.