Un grupo de panistas comenzaron a lucrar con la muerte de la gobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso y su esposo, Rafael Moreno Valle, para pedir la destitución de Marko Cortés como presidente nacional del PAN.
Los inconformes colocaron dos féretros –simulando los restos de Alonso y Moreno Valle- afuera de la sede nacional panista para exigir la renuncia de Cortés por imponer a Enrique Cárdenas Sánchez como candidato al gobierno y dejar a un lado a la militancia.
A través de un comunicado, inconformes denunciaron la intromisión del Yunque en la designación de Enrique Cárdenas, por lo que exigieron que dicho grupo con intereses económicos y políticos oscuros saque las manos y no regrese a conducir al PAN local con los resultados de siempre.
Indicaron que Marko Cortés deshonró la lucha que hicieron Moreno Valle y Martha Erika Alonso, pues colocó un perfil antipanista para la contienda electoral.
No se debe permitir el atropello que pretende MARKO CORTÉS en Puebla, porque “es una verdadera bofetada que designe como candidato a gobernador a alguien que hace unos meses estuvo a punto de ser el candidato de MORENA y que perdió la candidatura con Luis Miguel Barbosa”.
Es preciso señalar que el documento enviado a medios de comunicación no estuvo firmado por alguna persona, pues solo se envió de un correo a nombre de José María Iguíniz.
Fue el pasado miércoles 6 de marzo cuando el Comité Ejecutivo Nacional designó a Enrique Cárdenas como su candidato al gobierno.
Lo anterior generó molestias entre panistas como el exdirigente estatal del PAN, Jesús Giles, quien dijo que si se quería apoyar un perfil ciudadano se hubiera elegido a Antonio Gali López.
VER: “Si el PAN quería un ciudadano debió apoyar a Gali Jr. para la gubernatura”: Giles