El Instituto Nacional Electoral puso fin a los debates acartonados entre los candidatos al gobierno del estado y que favorecían solamente al aspirante oficial. Con el nuevo formato que aprobó el Consejo General del INE, los aspirantes a Casa Puebla ahora sí debatirán y tendrán una batalla de argumentos y contra argumentos.
La tarde de este martes, el Consejo General del INE aprobó los lineamientos para el debate entre los candidatos a la gubernatura para las elecciones extraordinarias, las cuales se llevarán a cabo el próximo 2 de junio.
El consejero Ciro Murayama quien preside la Comisión Temporal de Debates fue quien dio los detalles de los lineamientos para el ejercicio democrático entre los abanderados a Casa Puebla, así como los argumentos por los que se determinó hacer un ejercicio democrático más innovador y similar al de los presidenciables que se llevó a cabo en 2018.
El presidente de dicha mesa de trabajo informó que el debate se llevará a cabo el próximo 19 de mayo a las 20 horas, la sede será en la BUAP y no generará ningún costo para el INE. Además, será transmitido en televisión abierta y redes sociales, para que tenga mayor cobertura y los poblanos que viven en el extranjero puedan presenciar dicho ejercicio.
Tendrá una duración de 90 a 120 minutos y dependerá de los candidatos que se registren, por lo que señaló que hasta el momento es imposible definir cuánto tiempo durará concretamente. Habrá dos moderadores que serán comunicadores locales. Constará de tres ejes temáticos: Empleo y Desarrollo Regional; Atención a Comunidades Indígenas y Migrantes y el tercero será Seguridad, Federalismo y Estado de Derecho.
Además, Ciro Murayama explicó que habrá innovaciones para este debate, por ejemplo, los moderadores tendrán una participación activa, podrán cuestionar a los aspirantes al gobierno del estado y no solo se limitarán a medir el tiempo y las participaciones.
Habrá reglas de moderación activa como las que nos dieron resultados en los debates pasados del 2018. Los moderadores podrán cuestionar, no serán cronómetros parlantes, vamos a incluir preguntas sobre temas propuestos a partir de estudios y encuestas, habrá lenguaje de señas, vamos a poner en la página INE una versión de debate con subtítulos para personas que no escuchan”, expresó.
Dijo que por primera vez en Puebla, el debate no implicará una mera comparecencia ante los simpatizantes de cada uno de los aspirantes: “El INE tuvo una divisa fundamental, la definición de que los debates deben servir a la ciudadanía más que a los protagonistas del debate. Deben permitir el contraste de ideas, la réplica, contrarréplica, el debate, y no ser una serie de monólogos consecutivos en un mismo foro de televisión”, dijo.
El único de los consejeros que tuvo un punto de vista negativo del formato fue José Roberto Ruiz, quien acusó que una moderación activa por parte de los moderadores conlleva ciertos riesgos.
