Fernando Manzanilla Prieto, titular de la Secretaría General de Gobierno, aseguró que quien tendrá la última palabra en cuanto a la revocación de la concesión a la empresa Agua de Puebla será el gobernador electo, Luis Miguel Barbosa Huerta, en cuanto tome posesión el próximo 1 de agosto.
“El contrato por ejemplo de la concesión del agua se hizo muy rápido. Creo que fue licitado, desde un inicio hasta el final en un proceso de tres meses cuando estos contratos se llevan años o al menos seis meses o más para poder abrirlo a concursos internacionales y que lleguen otras empresas con otras opciones”, comentó Manzanilla.
Entrevistado tras la colocación de la primera piedra del Centro de Convivencia Familiar del Poder Judicial del Estado, Manzanilla explicó que la concesión a la empresa Agua de Puebla no puede ser avalada por el gobernador ya que no la conoce. Además, insistió en que existen muchos contratos de concesión amañados.
“Mi opinión es que muchos de los contratos que se hicieron, de los contratos de concesión, de los contratos de PPS, de los contratos de obra pública importantes, todos guardan cierto sospechosismo, no fueron procesos transparentes y ese es el gran tema, que cuando el gobernador Barbosa, el gobernador electo, no puede avalar un tema que no conoce”, agregó al respeto el titular de la SGG en Puebla.
El funcionario estatal dijo que se tiene que tomar una decisión “muy medida, muy meditada en cuanto a lo jurídico, a lo financiero y a lo técnico” y así evitar daños a la administración entrante. Por otro lado subrayó que aunque otros actores políticos planteen la revocación del contrato, como los diputados locales, solamente al gobernador le concierne tomar acciones al ser un servicio estatal.
“Me parece muy bien que haya actores que hagan comentarios pero es una decisión que corresponde al gobernador electo que cuando llegue deberá analizar. Es un órgano estatal, de responsabilidad estatal”.
Como CENTRAL informó, el contrato de la concesión a Agua de Puebla salió a la luz después de cinco años. Con él, el gobierno de Rafael Moreno Valle entregó a la empresa Concesiones Integrales, ahora Agua de Puebla, la operación del servicio del vital líquido en la zona metropolitana del estado.
Uno de los apartados más importantes que vienen dentro del documento es la proyección que la empresa realizó de los ingresos que puede recaudar durante los 30 años que presten el servicio.
De acuerdo con el título de concesión y cuya copia está en manos de CENTRAL, la cifra de las ganancias de Agua de Puebla es exorbitante. De 2014 a 2043, la empresa pretende tener ingresos por 173 mil 240 millones, lo cual cobraría por el servicio del agua, drenaje, saneamiento, recargas y sanciones, factibilidades, así como de medidores y otros ingresos.