Ante lo que parecía una misión muy complicada, el equipo que dirige el Chima Ruiz, México Sub-17, enfrentó a Holanda por un boleto en la final del Mundial juvenil, y los mini tricolores sacaron el carácter para conseguir el boleto en la instancia de los penales 4-3, y en muerte súbita.
El primer tiempo fue totalmente de México, y el dominio era abrumador sobre la portería defendida por Calvin Raatsie, pero los aztecas no consiguieron el tanto de la ventaja, y llegó el descanso con el tanteador empatado sin goles.
Ya en el complemento, las cosas cambiaron por completo a favor de los tulipanes. El conjunto europeo encontró una mina de oro por las bandas, y por ahí fue que llegaron una gran cantidad de centros, pero los zagueros tricolores se revolvieron bien para despejar muchas pelotas.
Cerca del 70′ un centro por derecha al manchón penal, Youri Regeer remató de volea, pero la mandó a las gradas en un aviso por demás peligroso de lo que estaba por venir.
Cuatro minutos después, el mismo Regeer desbordó por la izquierda, entró al área chica ante la débil marca de Alejandro Gómez, y venció Eduardo García para darle la ventaja a los holandeses.
Pero cinco minutos después, y ante una tímida reacción mexicana, el silbante marcó una falta fuera del área grande por el centro, y Efraín Álvarez cobró magistralmente el tiro libre directo para empatar. Así acabaron los 90′ reglamentarios.
El momento definitivo
A la hora de cobrar los penales para conocer al ganador, el autor del empate se paró en el manchón, y lo tiró a lo Panenka por el centro, y el arquero lo detuvo.
Después los holandeses anotaron, y se venía la noche para México, pero el guardameta Eduardo García fue el héroe al detener tres penales, y ya en el sexto disparo, nuestro portero adivinó la dirección de balón, y México disputará la final el próximo domingo.