Tras la visita del gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, integrantes del Frente Estudiantil para Todos que fueron rechazados por la BUAP, retiraron el plantón y la huelga de hambre que mantenían en el Zócalo de Puebla desde hace 27 días pues exigían que el rector, Alfonso Esparza Ortiz, les brindara un espacio en la universidad pese a que no alcanzaron los puntos suficientes en el examen de admisión.
En rueda de prensa, los inconformes señalaron que el retiro se debe a un acto de buena fe y a que buscarán el diálogo antes que el conflicto. Además, anunciaron que ocho de los rechazados aceptaron la invitación del gobernador para incorporarse a las universidades estatales.
"El día de ayer Barbosa visitó el plantón. Por la noche, después de evaluar las condiciones, la Asamblea ha decidido que levantemos el plantón. El gobernador se ha comprometido a mediar para alcanzar la mesa con la Rectoría. Vemos su buena disposición a contribuir con ello", dijo una de las inconformes.
Los huelguistas mencionaron que giraron un oficio a la BUAP en el que reafirmaron la postura de que se incremente la matrícula y se contraten a más docentes.
Finalmente, presentaron una carta a la Oficialía de Partes en donde notificaron al gobernador de Puebla que tras su visita retiraron el plantón pero exigieron reuniones tripartitas con el gobierno del estado, con la BUAP y con los integrantes del frente para que sean atendidas sus demandas.
"Agradecemos la buena voluntad y disposición que ha mostrado con los jóvenes excluidos de la educación superior. En la certeza de que se resolverá un problema importante para los jóvenes en el estado", señala el documento
Este 12 de agosto, Miguel Barbosa visitó el plantón que un grupo de jóvenes mantenía desde hace unos días en el zócalo de Puebla, les pidió que lo levantaran y que terminaran con la huelga de hambre, porque lastimarían su salud.
El mandatario estatal no les ofreció becas ni mucho menos un lugar en la máxima casa de estudios, que año con año realiza un examen de admisión para concursar por los lugares disponibles, sino que les pidió ponerse a estudiar para que el siguiente año puedan volver a presentar el examen.
Miguel Barbosa señaló que habrá un diálogo permanente entre el gobierno del estado, la universidad y los aspirantes, por lo que anunció que trabajarán con el rector, Alfonso Esparza Ortiz, para que el año siguiente se incremente la matrícula, principalmente en la carrera de medicina.