El supuesto cuerpo fue reportado en redes sociales, por lo que autoridades municipales acudieron al lugar y constataron que se trataba de un adorno pues durante la noche en esa casa se realizó un Halloween
El señor Schmitz descubrió que el nido de cucaras estaba en su jardín trasero, donde también se encontraban sus perritos. La esposa de Schmitz, en la desesperación (o eso queremos pensar), le pidió a su marido que se deshiciera de ellas de una vez por todas… y aquí es cuando se pone buena la historia