Las tres personas asesinadas la noche del pasado 8 de noviembre, al interior de un domicilio ubicado en el municipio de Cuautlancingo, eran integrantes de una banda delictiva dirigida por colombianos, y los hechos obedecieron a un ajuste de cuentas pues previamente habían realizado un atraco del que no quisieron repartir el botín.
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De acuerdo a información publicada por El Sol de Puebla, la Fiscalía General del Estado (FGE) descartó por completo que un posible robo a casa habitación y ya investiga el triple homicidio como un ajuste de cuentas entre miembros de una banda delictiva.
Las víctimas, dos hombres y una mujer, son originarios de Puebla, Tabasco y Chiapas y al momento de realizar las diligencias correspondientes al interior de la casa ubicada en la calle Tercera Privada de Alcanfores #16 de la colonia Villas Bodet, las autoridades encontraron un arma de fuego, cinta canela y demás instrumentos prohibidos.
La versión de las autoridades indica que previo al asesinato, la banda había cometido algún hecho delictivo, pero que se habrían negado a repartir el botín. Esto habría sido el motivo por el cual sujetos armados, a bordo de cuatro vehículos, llegaron hasta al domicilio y exigieron “su parte”. Los dos hombres y la mujer siguieron negándose a repartir las ganancias y fue en ese momento que los ejecutaron.
