Benito N., alías “El Tarzan” y Gabriela N, los integrantes de la banda denominada “Los Tarzanes”, llevaban operando un año el robo de combustibles en la zona de Villa Frontera, al norte de la capital poblana pero solamente se trata de una pequeña parte de una agrupación criminal enorme.
A pesar de que la Secretaría de Seguridad Pública Estatal y la Secretaria General de Gobierno presumieron la detención como un gran logro, la banda tiene más de 50 integrantes, según informaron fuentes de PÁGINA NEGRA en el norte de la ciudad.
“Los Tarzanes” tienen una estructura compuesta por distintas familias cuyos miembros se encuentran en las zonas de Villa Frontera, Central de Abasto y la calle Camino a Tlaltepango. Esta banda además de la toma clandestina de gas tiene al menos tres puntos más donde se encuentran sus tomas clandestinas.
En mayo y junio de este año, las autoridades recibieron denuncias anónimas sobre el robo de combustible y aunque se dio inicio a las investigaciones, fue la mega fuga de gas LP la madrugada del pasado miércoles 12 de septiembre, lo que provocó que las autoridades comenzaran la investigación que sirvió para dar con su paradero.
Gustavo Huerta Yedra, subsecretario de Inteligencia de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) explicó que la banda de “Los Tarzanes” tiene antecedentes que indican que comenzaron a operar en la zona desde hace un año y además del robo de combustible, también se dedican a otras actividades ilícitas como el narcomenudeo.
Aunque ya se habían presentado denuncias, tras la fuga que provocó la evacuación de casi 2 mil familiares ante un riesgo de fuga, elementos de la Procuraduría General de la República (PGR) acudieron al lugar y realizaron dictámenes periciales que ayudaron a identificar a Gabriela N. y Benito N.
Las autoridades del estado explicaron que se trata de una banda local y desde hace cuatro meses incrementaron sus actividades relacionadas al robo de combustible y gas L.P. Durante la madrugada, al predio donde vivía Gabriela N., llegaban pipas para cargar combustible y fue justamente en estas fechas cuando se realizaron algunas denuncias anónimas.
En el predio donde vivía Gabriela N., acudían en la noche pipas a cargar hidrocarburo y gas LP. El predio que encontraron las autoridades es tal y como lo describe la denuncia anónima. Se observa una barda y al lado abrían la válvula y colocaron la manguera que es la que conectaban a las pipas, declaró el secretario de Seguridad Pública, Jesús Morales Rodríguez.
Tras la fuga del 12 de septiembre, las autoridades identificaron dos predios ubicados en la misma zona; es decir, al norte de la capital poblana. Dichos inmuebles, según el titular de la SSP, mostraron el historial delictivo de la banda pues en las fachadas se encontraron varios impactos de arma de fuego; es decir, ya habían tenido enfrentamientos con otros grupos delincuenciales.
El tercer domicilio se ubicó gracias al intercambio de información con la Unidad de Inteligencia de la Marina. Ahí fueron localizadas las dos persona detenidas y se “montó vigilancia discreta” hasta que la mañana del 19 de septiembre fueron detenidos en una gasolinera ubicada detrás de la Central de Abastos, a un costado de la autopista México-Puebla.
Para la detención se requirió el apoyo de Gendarmería, de la Policía Federal, Estatal, Fiscalía General del Estado y del Grupo de Atención y Reacción Estratégica Policial (GAREP) de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal, pues un grupo de personas llegó al lugar para evitar la detención. Incluso, cuando fueron trasladas al C5, este lugar fue resguardado por temor a que pudieran llegar a “rescatarlos”. Aunque se dijo que Benito N y Gabriela N tienen relación con la organización Antorcha Campesina, las autoridades dijeron que no tenían confirmada está información.
VER: Resguardan C5 tras detención de presuntos huachicoleros; temen que vayan a rescatarlos
Sin embargo, estas dos personas únicamente fueron puestas a disposición de la Fiscalía General del Estado por los delitos de privación ilegal de la libertad y daños en propiedad ajena. El primero de ellos se debe a que durante su detención, supuestamente retuvieron a dos elementos de la Policía Estatal; el delito de daños en propiedad ajena se debe a que causaron destrozos a una patrulla.
La carpeta por el robo de combustible quedó a disposición de la Procuraduría General de la República (PGR) debido a que se trata de un delito federal. Pemex también presentó la denuncia correspondiente y se siguen integrando datos, pues en el lugar se tienen identificadas más tomas.
Por último, mencionaron que hay más integrantes de “Los Tarzanes” por lo que se está dando seguimiento a la investigación y agradecieron a las personas que denunciaron los hechos.
Quisiera agradecer a la sociedad civil que nos poyo con los datos fundamentales para el seguimiento, declaró Huerta Yedra.
VER: Detienen a "Los Tarzanes", la banda que provocó la fuga en Villa Frontera
