Éric Drouet, quien se ha posicionado como el líder de los 'chalecos amarillos' en Francia, fue detenido por la autoridades policiales la tarde del miércoles por "organizar una protesta sin notificación previa".
El hecho ocurrió en la calle Royale, a 500 metros de la emblemática avenida de los Campos Elíseos, en la capital francesa, donde el joven camionero de 30 años se disponía a realizar una concentración que había convocado por Facebook, en apoyo al movimiento popular, recoge Le Figaro.
La noche del miércoles decenas de personas se había reunido en las cercanías del Arco del Triunfo para esperar a Drouet cuando ocurrió el arresto, que fue rechazado por los presentes al grito de 'Dictadura' mientras la Policía se lo llevaba a una jefatura.
La detención
Antes de la aprehensión, el camionero había encendido velas en la plaza de La Concordia en memoria de las víctimas del movimiento, según Le Jornal de Dimanche.
Además de Drouet, otros 'chalecos amarillos' fueron arrestados para verificar su identidad, informaron las autoridades.
En Francia cualquier manifestación debe ser declarada con anticipación. De no ser así, el convocante es sancionado con hasta seis meses de prisión y una multa de 7.500 euros, según el Código Penal.
Los manifestantes, que han ignorado de manera repetida la ley que les obliga a obtener autorización previa para protestar, se han enfrentado en varias oportunidades a las fuerzas del orden francesas.
El propio Drouet fue retenido por la Policía el pasado 22 de diciembre bajo el cargo de "porte de arma prohibida", debido a que tenía un palo en sus manos. Será juzgado por ese delito el próximo 5 de junio.
Las reacciones
El arresto de Drouet fue criticado por Jean-Luc Mélenchon, presidente del movimiento de izquierda Francia Insumisa, quien se preguntó si la acción era un "abuso de poder" y escribió en su cuenta de Twitter: "Una fuerza de policía política ahora ataca y acosa a los líderes del movimiento de los chalecos amarillos".
De igual manera, pidió que cesara la "violencia, condenas y arrestos" de los manifestantes.
Para algunos medios locales, la detención del líder del movimiento forma parte de una estrategia que busca presentar a Drouet como un "mártir", recuperar la popularidad que han perdido los 'chalecos amarillos' o lograr el consenso entre la derecha y la izquierda sobre el rechazo a las políticas de seguridad del presidente Emmanuel Macron.
