La familia de la pediatra Zyanya Estefania Figueroa, quien fue encontrada sin vida el 16 de mayo en Puebla, exigió a las autoridades estatales reabrir el caso pues creen que su hija no se suicidó si no que pudo haberse tratado de un feminicidio y el próximo jueves realizarán una reconstrucción de los hechos en el domicilio que habitó la joven médico en San Andrés Cholula.

En una rueda de prensa realizada en el Centro Nacional de Comunicación Social (Cencos), en la Ciudad de México, María Patricia Becerril y Martín Figueroa señalaron que la Fiscalía General del Estado fue negligente en el caso de su hija por lo que exigen que se retome la investigación.

La familia fue acompañada por la activista y periodista Verónica Villalvazo, conocida por su blog Frida Guerrera, con el que se da seguimiento a casos de feminicidio en todo el país. Durante su intervención, la activista subrayó que la escena donde fue encontrada Zyanya no fue sellada y que la Fiscalía de Puebla cerró el caso aduciendo que se trató de un suicidio.

Verónica Villalvazo señaló que no es la primera vez que la Fiscalía en Puebla da carpetazo a un caso de feminicidio con tal de no investigar como ocurrió con la niña Karina Reyes Crescencio, de 13 años, originaria de Oaxaca y a quien catalogaron en el levantamiento de cadáver como prostituta y su cuerpo fue enviado a la fosa común.

Por su parte, Salvador Martínez, perito contratado por la familia Figueroa para encargarse de la reconstrucción de los hechos, señaló que el cuerpo de la joven presentaba lesiones que no correspondían a una asfixia mecánica por ahorcamiento, por lo que temen que haya sido asesinada para después ser armada una escena de suicidio.

“Hablé con ella el 11 de mayo”

María Patricia Becerril, la madre de Zyanya, relató en rueda de prensa que vio por última vez a su hija el 18 de abril: “Mis hijos me sorprendieron por mi cumpleaños y me visitaron (...) El 11 de mayo me marcó por el día de las madres. Hablé con ella ese día. Y fue la última vez”.

Según relató la familia Figueroa Becerril, Zyanya tenía cambio de turno cuando sucedieron los hechos. Salió del Hospital del Niño Poblano y tenía que acudir al Hospital de la Mujer. Los médicos del Hospital de la Mujer no informaron inmediatamente que había faltado.

Se nos hace extraño que haya ocurrido eso. Que no dieran aviso. Se perdió tiempo importante ahí, quizá se habría salvado la vida de mi hija si hubieran notificado de inmediato que no llegó. Más siendo Puebla uno de los estados donde más feminicidios hay, ¿cómo fue que entonces faltó y nadie preguntó por ella, dijo María Patricia Becerril.

Los padres de Zyanya fueron notificados de su presunto suicidio el mismo día que Zyanya fue encontrada. “Nos dijeron que parecía que quería cortarse las venas pero que no había tenido el valor y se habían colgado. Pero no lo creemos, mi hija no era así”, dijo su padre.

Mi hija no era ningún fracaso (...) Mi hija me daba lecciones a mi mismo. A todos. Era una joven intachable, siembre en el cuadro de honor desde la primara. Una niña que le daba ánimos a sus propios compañeros (...) Por eso no creemos que se haya suicidado por ser víctima de bullying, ella era muy fuerte, relató Martín Figueroa.

A la rueda de prensa Martín y Mraría Patricia llevaron una fotografía de Zyanya donde recibía un premio en Hospital de Pediatría de la Ciudad de México así como un reconocimiento de la Secretaría de Salud por su desempeño en el Hospital del Niño Poblano.

Así queremos que la recuerden. Como una mujer emprendedora, fuerte, valiente. Una excelente pediatra. No como un fracaso. Ella no era así. Zyanya, la joven que nosotros conocemos dista mucho de lo que nos han informado las autoridades de Puebla, aseguró sh padre.

Temen que la carta no haya sido escrita por Zyanya

La familia de Zyanya se dijo dispuesta para que el cuerpo de la joven pediatra sea exhumado y se realice una investigación a fondo y además se profundice en pruebas que no fueron tomadas en cuenta de un inicio.

Incluso señalan que no tuvieron acceso a la carta póstuma de Zyanya. Su hermano Martín Becerril Figueroa llegó a Puebla para el levantamiento de su hermana, pero apenas y pudo ver el documento brevemente.

La carta tiene rasgos de su letra. Pero no estamos seguros. (...) La vimos hasta que fue publicada en medios de comunicación. La carta nunca nos la dieron. Solamente la vio Martín, comentó María Patricia.

Martín, en entrevista con PÁGINA NEGRA detalló que el documento forma parte de la cadena de custodia, por lo que jamás sus padres pudieron ver la carta, pero también pedirán que sea sometida a pruebas para confirmar si su hermana la escribió.

Además, la familia Figueroa Becerril aseguró que las autoridades de la Secretaría de Salud, así como los directivos del Hospital del Niño Poblano jamás les dieron la cara. Y sobre el supuesto apoyo económico y sicólogico que brindó la dependencia fue totalmente falso.

Nosotros pagamos el traslado, fue muy doloroso. Buscamos a la directora del Hospital del Niño Poblano y nos dijeron que no nos podía atender, que estaba en una junta muy importante. Jamás nos dieron la cara, comentaron los padres de Zyanya.