23 de Abril del 2024

Sobre la esperanza de un mesías y el respectivo hombre nuevo…

Por Luz Marina Manzano Gómez / /

gritos esperanza

A 20 años de la llegada de un Chávez al poder y, ante el cumplimiento de 12 años de un Evo Morales en el poder, es válido cuestionarnos qué buscan los presidentes cuando se realizan convocatorias electorales tras convocatorias electorales, consultas populares tras consultas populares, con cualquier excusa. Aparentemente, muy democráticas sus estrategias.

Hemos hablado un poco de cómo los populismos enamoran a pueblos decepcionados con programas sociales, por ejemplo, cuando el hartazgo de los períodos presidenciales anteriores haría lo que fuera por lograr un cambio en una sociedad.

El cansancio de dos partidos que se han aliado para turnarse el poder y la llegada de un nuevo mesías que llega como un héroe salvador de éstos, “que todo lo podrá” y que, además tiene ideas para crear “un hombre nuevo” para una sociedad, definitivamente no son nuevos; pero increíblemente seguimos creyendo en insólitos, cuando es preferible creer en esto que dejar de creer en posibilidades de cambio, eso es muy duro para cualquier persona o pueblo, pues de esperanzas sí se vive… y los políticos lo saben más que nadie.

Por tanto, el problema no es sólo quien hace el papel de mesías, puede llamarse de una forma o de otra, si acaso su personalidad es lo que importa; el problema es cuando no somos críticos ante esas ideas personalistas que nos generan esperanzas, y la lealtad a una idea se convierte en fanatismo.

Claro que hay que tener esperanza… claro que pueden existir buenos políticos…

Pero ¿qué tal si en lugar de comprar la idea de un hombre nuevo, mejoramos un poco el que cada quien ya está construyendo en sí mismo cada día como ser humano, sin esperar que alguien nos diga cómo innovarnos según las ideas que le conviene promover?, ¿qué tal si al menos cuestionamos esas ideas "nuevas" que nos promueven?

Es una cuestión de creer en alguien, sí, pero también parece una cuestión de compra y venta de voluntades cuando así conviene a un mesías político…

Es un asunto de revisar la historia, sí, pues las formas de hacer política no son “nuevas” para cada período presidencial que se presenta, en América Latina en particular…

Es tema de consciencia… sí, y de comprender cada vez más nuestras historias si realmente queremos mejorarlas. Es posible que esto sea, quizás, adelantarse un paso a esa aterradora palabra “destino”…

Que en colectivo estemos alertas a “más de lo mismo” … pues de cuentos está llena la historia… alerta a conceder excesos de confianza y poder, alerta a los propagandistas y “democráticos” populismos, pues al menos eso, eso parece una MAYOR ESPERANZA.

Gracias por leerme.

EL HADA DE GUERRA.

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