La forma en la que el Presidente Trump ha prometido recibir a los migrantes centroamericanos, sobrepasa lo esperado históricamente para los migrantes que llegan a Estados Unidos. Amenazar de recibirles con tropas armadas es amedrentamiento psicológico desde el mismo momento de su pronunciamiento público.
Ciertamente:
... una premisa fundamental de la soberanía nacional es que un Estado tiene el poder de controlar sus fronteras y regular a los no nacionales que admite en su territorio; en ciertas circunstancias, a expulsar a los no nacionales y a tomar los pasos necesarios para proteger su seguridad. Este poder para administrar la migración es, sin embargo, compensado por sus derechos fundamentales. Todos los derechos humanos aplican a los migrantes, pero existen ciertos derechos relacionados con el movimiento que son particularmente relevantes en el contexto de la migración, por ejemplo, el derecho de buscar asilo, el derecho a la nacionalidad, y el derecho a la unidad familiar (reunificación familiar). (OIM, 2009)
Por tanto, un mandatario de un Estado no puede disponer de vidas humanas a su antojo sólo por cruzar su frontera. La soberanía y autodeterminación de los pueblos no está por encima de los derechos humanos fundamentales.
La sociedad internacional completa, tanto los gobiernos de todos los países del mundo -especialmente los más poderosos- como las organizaciones no gubernamentales tanto de EEUU como internacionales, los medios de comunicación a nivel internacional, y hasta los grupos epistémicos de las universidades de prestigio, se encuentran con los ojos puestos en la frontera méxico-estadounidense, puesto que la travesía del éxodo centroamericano es histórica y corresponde a necesidades de sobrevivencia más que a una mera búsqueda de calidad de vida. Todo lo que ocurra en esta frontera en estos próximos días será observado, analizado y cuestionado, lo gobernantes por más poder que tengan, están limitados a la audiencia internacional, en especial cuando las condescendencias económicas de países aliados son necesarias y hasta la bolsa depende de un hecho social trascendental que podría afectar al mundo de una u otra forma.
Es decir, cuidadito con genocidios... Hay un MUNDO observando... Aquí hay una ciudadanía internacional cuidando los movimientos gubernamentales que puedan llevarse a cabo... y cada vez la sociedad civil en los diferentes países cobrará más fuerza, los mismos norteamericanos estarían en contra de que su gobierno cometiera una fatalidad, y esto podría traer conflictos sociales. Que se aproveche ese capital humano y de manera organizada puedan regular su entrada según sus normas, es lo mínimo que se espera de un país con tradición multicultural en su territorio.
Estamos todos atentos.
Que se protejan los derechos humanos de los migrantes... todos alguna vez nos hemos sentido en necesidad de protección... Estos seres humanos necesitan PROTECCIÓN Y AYUDA... NO VIOLENCIA...
Estamos todos atentos.
Eso es lo que se espera... esa es LA ESPERANZA.
Estamos todos atentos.
OIM, (2009). Aspectos básicos para la gestión migratoria. 1era Edición: México.
