Hay situaciones con las que no me gusta lidiar pero tengo que hacerlo. Se las contaré y seguro más de una dirá ¡ah caray, me pasa también! Y repitan después de mí: ¡no estamos mal!
Bueno, resulta que desde hace un mes aproximadamente el menor de mis hijos ha estado batallando con gripa y tos (no infección), como creo yo el 90% de su salón. Pensamos ¡ya está bien! Y otra vez. Bueno, pues decidimos entre varias mamás limpiar el salón a conciencia, cloro por aquí y por allá, lysol por todos lados.
Pero de repente otra vez y entonces convocamos al resto de las mamás para limpiar de nuevo, ¿Y qué creen que haya pasado? La respuesta se las daré más adelante.
Creo yo que fue una idea bien planteada y finalmente es por el bien de los niños, por mucho que haya un conserje, es necesario hacerlo a detalle y más cuando es un jardín de niños y están en mayor riesgo de contagio.
La ansiada respuesta:
Quiero anticipar que somos 9 mamás que siempre estamos ahí apoyando a la maestra que si con las flores, que si con los manteles, en fin. Bueno, decidimos que sería justo que las demás apoyaran también y se lanzó la petición al todo el grupo. La respuesta llegó solo de dos mamás más ¡2 de casi 28! ¿En serio?
No entiendo a la gente así, que espera que todo le caiga del cielo, que delega su responsabilidad a los demás, que abusa de la buena onda de otro grupo pensando “pues lo tienen que hacer ellas, ellas están fastidiando”. Siempre he estado de acuerdo en no juzgar y menos entre mujeres, pero cuando sabes que la falta de participación no es por falta de tiempo sino por falta de voluntad y por abusar, ahí si no creo ser la única que miente madres.
En todos lados hay este tipo de gente pero es penoso que en una escuela donde están formándose niños (“el futuro de México“) las primeras personas en poner pésimos ejemplos sean los adultos y peor aún que sean los que tienen en sus manos LA FORMACIÓN DE ESOS NIÑOS ¿Qué demonios les estamos enseñando? Hijo no hagas nada, alguien más lo tendrá que hacer. O hijo hazte pato, siempre hay alguien que terminará trabajando doble pero tú no te canses.
Después no culpen al gobierno, a los empresarios o hasta a Dios de su “mala suerte”. ¿Quieren hijos triunfadores? desde niños se les enseña ¿No quieren que pasen las mismas carencias? desde ya pónganle el ejemplo de trabajo.
No les dejen las responsabilidades que adquirieron como padres a otros, si les toca participar en su escuela ¡háganlo! pongan el ejemplo.
Mi Twitter@mafergarnica escríbanme y usen el #cosasdemamá.
