Sabemos que AMLO ganó
no por propuestas o ideas
por el hartazgo de corrupción
y una guerra que solo arrecia.
La realidad le cayó encima
al omnipotente Obrador
y a su vocera consentida
no le gustó esta sujeción.
Su gran activo Clouthier
definitivo en su campaña
no coincide con su poder
y prefirió irse a la cámara.
Van los primeros caídos
de su aún no gobierno
la situación actual ya vieron
ya llevan varios tropiezos.
Comienzan los desacuerdos
recular y que “siempre no”
empoderar adversarios viejos
y al ejército dar la razón.
¡Dónde está la congruencia!
pues tía Tatis nos lo vendió
como ese hombre de conciencia
que necesita la nación.
Y tía Tatis lava sus manos
a fin de cuentas AMLO ganó
como quien vende armas al otro lado
se excusa “solo soy un vendedor”.
¿En que creyó cuando apoyó a AMLO
que antes de tiempo renunció?
De Bartlett dijo: “hay mejores cuadros”
y un zape fuerte se llevó.
¿Quería acaso un puesto más alto
o no le gusta cada decisión?
La disciplina no es precio bajo
sabía lo voluble de su patrón.
Ser responsables en las campañas
no andar de fácil hocicón.
Tía Tatis no asumirá las fallas.
de un proyecto que nos vendió.
Ahí va la cuarta transformación.
Hasta el lunes amable lector.
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