A pesar de ser una banda con una trayectoria de décadas y destacada en el género gótico, los poblanos le hicieron el feo a Lacrimosa, pues apenas asistieron alrededor mil personas a su concierto en el auditorio del Complejo Cultural Universitario (CCU) la noche de este lunes 4 de diciembre.
Aunque no hubo mucha asistencia, Tilo Wolff y Anne Maartjana Nurmi mostraron su calidad de artistas, ya que se entregaron al público en todo momento, e incluso reían cada vez que concluían algún tema.
La banda apareció alrededor de las 21:00 horas, en un escenario con matices rojos y negros, así como con imágenes alusivas a su nuevo álbum "Testimonium".
La ambientación del escenario generó que fuera un concierto "íntimo" y "oscuro", que agradó a los asistentes, quienes en todo momento se mantuvieron efusivos, de pie y coreando el nombre de Tilo Wolff.
Entre las canciones que más emocionaron a los poblanos estuvieron “Schakal”, “Feuer”, “Alleine zu zweit”, así como “Lichtgestalten EP".
Al finalizar algunos de sus éxitos, Tilo Wolff se dio tiempo para agradecer en español con la palabra "Muchas gracias".
En los minutos finales del concierto, uno de sus fans le entregó una bandera de México a Tilo Wolff, quien la recibió con cariño y portó como estandarte.
Tilo Wolff salió vestido con pantalón negro y una chamarra negra con el logo de Lacrimosa, mientras que Anne Marjanna lució un vestido también de color negro.
El concierto duró aproximadamente dos horas y los artistas lograron mantener en al público de pie.
Cabe recordar que previo a su concierto, el vocalista de Lacrimosa, Tilo Wolff declaró que "Puebla es una ciudad con una gente muy emocional, buena para vivir y muy limpia".
Además, consideró que la música sí ha cambiado conforme han pasado los años; sin embargo, aclaró que esto también se ha dado como una manera de adaptarse a cada época y estar en el gusto de la gente.