Saturday, 20 de April de 2024

Nacional

Café Tacvba dejará de tocar “Ingrata” para evitar promover feminicidios

- Foto: Especial

El vocalista de la agrupación mexicana señaló que “aunque muchos puedan decir que es sólo una canción”, la música es una expresión cultural más y “esa cultura es la que hace que ciertas personas se sientan con el poder de agredir”.

Por El desconcierto /

Es una de las canciones más conocidas en el continente de la banda mexicana Café Tacvba, que fue lanzada en su disco “Re” el año 1994. “La Ingrata” es una composición que parodia a la música norteña y habla del corazón roto de un macho despechado por amor.

No obstante, a más de 20 años de su lanzamiento, la agrupación tomó la drástica medida de eliminarla de su repertorio, con el objetivo de cuadrarse con la lucha en contra de la violencia hacia la mujer, sobre todo en su expresión más letal: el femicidio. Esto, haciéndose cargo de lo que relata la letra de la canción, que hace alusión directa a un hecho de este tipo, según consigna El Dínamo.

Una de las estrofas más violentas de “La ingrata” reza así: “Pues si puedo hacerte daño, solo falta que yo quiera lastimarte y humillarte (…) Por eso ahora tendré que obsequiarte un par de balazos pa’ que te duela. Y aunque estoy triste por ya no tenerte voy a estar contigo en tu funeral“.

Durante el mes pasado, la banda se presentó en el concierto de despedida de las Fiestas de Palmares en Costa Rica y se negaron a tocar la canción en vivo, pese a la insistencia del público.

En tanto, en noviembre de 2016, en entrevista con La Nación de Argentina, Meme, el tecladista de la agrupación, señaló que “la canción que se basa en el sentido del humor. La inspiración tiene que ver con los corridos norteños, cuyas letras muchas veces narran historias que no tienen sentido del humor. Si genera una lectura incorrecta es algo que está más allá de la intención que tenía en su momento”.

Sin embargo, el vocalista Rubén Albarran manifestó que “éramos bien jóvenes cuando se compuso y no estábamos sensibilizados con esa problemática como ahora todos sí lo estamos. Creo que es un momento de repensar si la vamos a seguir tocando o si le cambiamos la letra. Porque ahora sí estamos sensibilizados, sí sabemos del problema. Y yo, personalmente, no estoy interesado en apoyar eso”.

Del mismo modo, el músico argumentó que “mucha gente puede decir que es sólo una canción”. No obstante, apuntó, “las canciones son la cultura, y esa cultura es la que hace que ciertas personas se sientan con el poder de agredir, de hacer daño, de lo que sea. Personalmente, desde hace mucho, dije “pistola” no me gusta, y con mi cuerpo hago la broma y esos balazos son de otro tipo”.

El desconcierto