Imprimir esta página

¿Qué es el autosabotaje?

Por Betzabé Vancini / /

Tú, yo y el Ello...

El sabotaje se define como aquella acción que busca truncar de manera maliciosa una acción previamente planeada o prevista. Es ruin porque se hace “por debajo del agua” para que su efecto no pueda ser impedido. Ahora, ¿qué pasa cuando esa acción maliciosa está encaminada hacia nosotros mismos?

Todos los seres humanos tenemos -casi por naturaleza pero también mucho por cultura- sueños, deseos, anhelos que buscamos concretar con nuestro esfuerzo cotidiano, ya sea en logros académicos o profesionales, personales, familiares, de pareja, entre muchos otros. Eso se debe a algo que Rogers llamaba “tendencia actualizante” es decir, nuestra tendencia natural a la vida y al crecimiento personal. El autosabotaje es eso que frena nuestro crecimiento y en el último de los casos, nuestra felicidad.

Por ejemplo, empiezas una relación de pareja con una persona que te gusta mucho y te sientes muy bien. Todo fluye hasta que empiezan los pensamientos como “¿de verdad le gustaré?”, “Tal vez es mucho para mí”, “¿Qué tal que se encuentra a alguien mejor?” y entonces caes en inseguridad, empiezas a actuar de manera aprensiva, o con celos y la relación fracasa. Sólo para que puedas decirte “Claro, yo tenía razón, era demasiado bueno para ser verdad y no iba a durar”. Entonces viene otro ciclo de culpa, tristeza, sentimiento de abandono y además se refuerzan esas ideas de que eres poca cosa.

Lo mismo puede pasarte con un trabajo que representa un reto para ti, puedes sentir que no te mereces ese ascenso, ese sueldo o incluso el reconocimiento de tus pares o jefes.

En el autosabotaje hay un proceso interno de mucho dolor en el que la idea central es que somos merecedores de los fracasos y de las cosas malas que nos pasan, pero no así de las cosas buenas o de los éxitos. Somos incapaces de reconocer en nosotros mismos esa capacidad de éxito y peor aún, ni siquiera les creemos a los que nos dicen que sí lo merecemos.

Puede ser que según tus creencias le llames ‘kharma’ o castigo divino, o envidia o ‘todo eso que no se da’.

Para algunas personas, el autosabotaje rebasa las ideas y llega a las conductas francamente autodestructivas. Por ejemplo, beber de manera descontrolada antes de un examen importante, perder el teléfono cuando quedaste de ver a alguien importante para ti y vas tarde, enfermarte antes de viajar, terminar una relación con una persona que te hace bien, entre muchas otras cosas. 

¿Te ha pasado alguna vez? El autosabotaje no te deja disfrutar de los momentos buenos y te hunde en los malos reforzándote este mal concepto de ti mismo/a. No obstante, es un padecimiento que tiene cura. La forma de trabajar el autosabotaje en terapia es trabajando tu sistema de ideas y sus reforzadores; por ejemplo, que la próxima vez que logres algo, seas capaz de reconocer que te lo mereces porque obtuviste ese logro a partir de tu esfuerzo. Para no autosabotearse hay que aprender a valorarse, y para eso nunca es demasiado temprano ni demasiado tarde.

ANTERIORES