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Antorcha Campesina confiesa: SÍ invadimos ¿Yyyyyyyyyy...?

Por Selene Rios Andraca / /

No sé qué me dolió más: la garganta por los vientos desaforados de esta hermosa ciudad o los ojos por la extravagante respuesta de Antorcha Campesina para CENTRAL y para esta su tan gustada columna. La cosa no está sencilla. Estos aires cruzados me traen azorada y la postura de la organización familiar de los Córdova me trae en las mismas.

Claro no todo está perdido, para el dolor de garganta hay medicamentos y jarabitos de ajolote—que no saben la efectividad del chingado animalito molido con miel, más bueno que el vitvaporrúpero para lo otro no hay mejoralito si quiera y todavía no existen los curitas para los ojos. Y vaya que necesito, urgentemente, un par.   

La semana pasada, CENTRAL publicó un reportaje sobre la invasión de Antorcha Campesina en 2010 a una zona residencial del Banco Inmobiliario Mexicano valuada en 49 millones de pesos y de cómo el Poder Judicial Federal le ha ordenado al Gobierno de Rafael Moreno Valle en seis ocasiones desalojar a los agremiados de la organización “campesina”. En casi cinco años de gobierno, Moreno Valle no ha movido un dedo.

Antorcha Campesina se rehusó a darnos una entrevista y fue hasta ayer que el vocero en Puebla Aquiles Montaño publicó un texto muy largo dedicado CENTRAL titulado “Respuesta a la saña de Doger y periodicocentral.mx, en el que renglón a renglón agrede, en exceso, al lenguaje.

Más allá de la misoginia de Aquiles Montaño por asegurar que el “cerebro” del reportaje de CENTRAL es Enrique Doger y mucho más allá de sus emociones traducidas en frases inconexas y mal acomodadas, el vocero de Antorcha reconoce la invasión de la zona residencial “El Refugio” y enlista, de manera poco exitosa, los pretextos de la organización campesina para apañarse las 92 “casuchas” y los 76 lotes.

En resumen, Aquiles Montaño dice en su respuesta: Sí invadimos los terrenos, pero son unos “palomares” y ni están tan caros.

Ah bueno.

Estos son los puntos de Antorcha Campesina para justificar la invasión —en atención a ustedes lectores, separé los seis puntos con un espacio (un enter), algo que el autor de la respuesta se negó a hacer porque supongo que su religión antorchista le prohíbe andar usando esas cosas del diablo capitalista que son los espacios, los enters, la gramática, sobre todo la sintaxis, etcétera—:

1.      Antorcha no invadió (toda esa historia de las banderas y agresiones contra los guardias es un invento completo, producto de una mente pródiga en fantasías), sino que varios defraudados por el Banco que ahora nos acusa de “invasores de residencias”, decidieron tomar por la vía del hecho lo que ya les correspondía por derecho.
2.      Que una vez hecho esto, y ante un inminente desalojo, pidieron el apoyo de Antorcha para negociar con la empresa un precio justo por las supuestas “residencias”.
3.      Que las “residencias” (se ve que jamás se han asomado por ahí) no son tales ni valen “500 mil pesos”, sino que son verdaderas casuchas, de esas que llaman “palomares”.
4.      Que peritos libres de parcialidad con ambas partes han valuado las casas en mucho menos dinero del que piden los abusivos empresarios.
5.      Que los actuales ocupantes de las casas no se niegan a pagar, y han dicho que están dispuestos a hacerlo, siempre y cuando sea un precio justo producto de una evaluación imparcial. ¿Cuántos poblanos no han tenido que pagar cantidades exorbitantes por diminutas casas de interés social?
6.      Que si las negociaciones no han avanzado no es culpa de los colonos, sino de los empresarios que están cegados por la codicia (...).

 

#Plop

¿Ahora me entienden? ¿Curitas para todos? Por si alguno de ustedes se quedó con la duda de qué quiso decir mi querido Aquiles Montaño en esos seis puntos, aquí tienen un informe ejecutivo para su comodidad —y para sanar su alma—.

1.      Los que invadieron el terreno no eran Antorchistas, sino unos defraudados no-antorchistas por el Banco Inmobiliario Mexicano y fue hasta la media hora de la invasión que se convirtieron en Antorchistas.

2.      La invasión del terreno se llevó a cabo porque los defraudados-noantorchistas-mediahoradespuésantorhistas “decidieron tomar por la vía del hecho lo que ya les correspondía por derecho”. —En cristiano, invadieron por sus hue…—

3.      Pero que siempre no invadieron, porque nadie ni por muy loco que esté o por muy antorcho que sea invade su propia casa. Que ellos nomás se metieron a su casa, como lo hace cualquier persona todos los días de su vida.  

4.      Que bueno, o sea, sí invadieron pero que están en plena disposición de pagarle al Banco Inmobiliario Mexicano las 92 casas y los 76 lotes que se apañaron en el 2010.

5.      Esperen. Que tampoco están dispuestos a pagarle al Banco Inmobiliario Mexicano las 92 casas y los 76 lotes agandallados, porque los empresarios  tasaron las residencias y los predios con precios abusivos.

6.      Que ultimadamadresmente sí invadieron las casas y los lotes, pero que esas casas no son casas y mucho menos residencias sino unos pinchis  “palomares” baratos y de poca calidad. Casi, casi que más valdría vivir debajo de un puente que en esas “casuchas”, pero que pues no les quedó de otra y pues, invadieron esas “casuchas” y por muy “palomares” que sean ahí se van a quedar, le pese a quién le pese.

7.      Que los Antorchos están dispuestos a negociar con los abusivos banqueros por sus “palomares” de 500 mil pesos, siempre y cuando, no tengan que pagar por los “palomares” ni por las “casuchas”. —Ah bueno—

8.      Si las negociaciones están estancadas es culpa exclusiva de los malditos banqueros “cegados por su codicia” y no de los Antorchos que invadieron casas y lotes por sus purititas agallas.

Ay Dios. Los antorchistas que invadieron, pero que no invadieron, pero que sí invadieron, pero que no invadieron, pero que sí invadieron, pero que no invadieron…

Me tomaré mi jarabito de ajolote para que se me desinflame la garganta y mientras, me pondré a rezar a todos los santos para que Antorcha Campesina no haga una manifestación en las oficinas de CENTRAL.

Miau.

Posdata. Aquiles, querido amigo, residencia significa casa, no mansión ni palacete, significa casa, ca-sa. No tienes que andar entrecomillando la palabra. De nada.

Posdata 2. Aquiles, querido mío, CENTRAL y los Centralitos no podemos manifestarnos en la calle contra el autoritarismo, como lo propones, porque nosotros, a diferencia de ustedes, no queremos que nos regularicen terrenos apañados, que nos den candidaturas plurinominales, que nos condonen multas, que nos den lana para los “pobres”, que nos den obra,  ni nada parecido. Besitos.

 

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