Muchos esperan que Javier Duarte, hasta ayer gobernador de Veracruz, siga el ejemplo de Guillermo Padrés (Sonora) y se entregue voluntariamente a las autoridades, pero al parecer eso no sucederá.
Así lo deja ver su abogado Alejandro Jaimes, quien dijo que la decisión obedece a que no existen las condiciones ni la autonomía de las autoridades para garantizarle a Duarte de Ochoa un juicio justo.
En entrevista de la que da cuenta Reforma, el abogado además aseguró que la Procuraduría General de la República (PGR) no tiene pruebas contra su cliente y que las que se conocen son laxas.
Reprochó que por un lado la dependencia ofrece una recompensa de 15 millones de pesos por información que lleve a la captura de Duarte, pero por otro, niega ante juzgados de amparo que exista una orden de aprehensión en su contra.
"No, desde luego que no (se va a entregar). No estamos viendo que la situación sea imparcial, que haya, efectivamente, la autonomía y la independencia suficiente como para llegar a eso. Hablamos en general. Ya no sabemos de dónde viene la directriz, qué tan alta está la vara", sentenció.
Y es que reclamó que el Gobierno federal más que considerar al exgobernador un probable responsable, lo han convertido en un "villano".
Jaimes indicó que cuando le reclaman a la PGR mediante amparos presentar información de las acusaciones o los cateos, la dependencia federal niega los actos.
Asimismo, aseguró que las acusaciones contra su cliente están "confeccionadas" por la PGR como si fueran "trajes a la medida".
Y que las acusaciones hacia el exgobernador veracruzano de haber adquirido múltiples propiedades con dinero de origen ilegal, son "laxas" y sin pruebas, salvo un dicho aislado como el de un testigo colaborador.