Puebla, pese a que es la entidad con más universidades del país, sólo puede acreditar con este nombre a tres instituciones por sus aportaciones en el campo de la investigación, sentenció Axel Didriksson Takayanagui, académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
En este sentido el investigador consideró que sólo la Universidad Iberoamericana, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) y el Tecnológico de Monterrey, son las únicas que cumplen con ese concepto.
De acuerdo al especialista, ser una universidad implica hacer investigación, difusión de la cultura, extensión de sus conocimientos, generar vínculos con la comunidad, innovación científica y tecnológica, así como estar en todas las áreas de conocimiento.
Es así que consideró que las escuelas que no ofrecen un área de indagación son “changarros”, que están perjudicando directamente al crecimiento del país.
De acuerdo con el documento “Sistema Educativo de los Estados Unidos Mexicanos 2010-2011” de la Secretaría de Educación Pública (SEP) federal, en Puebla existían 426 escuelas de nivel superior.
Cuando solo ofrecen 10 carreras se les puede llamar Instituciones de Educación Superior; si ofertan tres, son escuelas; y las que tienen igual o menos y no hacen ningún tipo de aportación, son changarros”, refirió.
El mayor problema, agregó, es que los egresados son contratados al subempleo y al trabajo precario, ya que no cuentan con las herramientas.
Los egresados se tienen que conformar con cualquier cosa. No producimos conocimiento, todos lo que consumimos es importado”.
Didriksson Takayanagui alertó que para el 2030, en nuestro país habrá 18 millones de jóvenes más y por ahora solo 2 de cada 100 personas de entre 15 y 25 años tiene oportunidad de continuar con sus estudios a nivel superior. En México, aclaró que el 60 por ciento de los jóvenes que no estudian ni trabajan son mujeres.