Deborra-Lee Furness es una de las mujeres más envidiadas del planeta. No en vano tiene un sólido matrimonio con el que pasa por ser uno de los actores más deseados de Hollywood: Hugh Jackman.
Recientemente, la señora de Jackman concedió una entrevista en el Today Show en la que, aunque después trató de esconder su declaración con un «es broma», lo cierto es que generó un importante revuelo al despertar uno de los fantasmas de la industria: la negativa de muchas de las esposas de varios actores a que sus parejas actúen junto a quien, precisamente en una de esas actuaciones, se llevó por delante -culpable a partes iguales conBrad Pitt- el matrimonio de Jennifer Aniston.
«Mi marido tiene prohibido aceptar ningún papel para trabajar con Angelina», dijo la esposa de «Lobezno». Corrigió luego entre risas nerviosas su afirmación, pero es cierto que lo dicho en alto es un pequeño mantra en Hollywood.
Desde que Angelina Jolie y Brad Pitt comenzasen su duradero romance en el rodaje de «Sr. y Sra. Smith» (2005), cuando el segundo estaba casado con Aniston, no son pocos los actores que deslizan en los mentideros de Hollywood idéntico veto conyugal.
Por eso buena parte de la industria y de la audiencia asumió como auténtica la «broma» de Furness. Verdadero o no, lo cierto es que ambos actores no han coincidido nunca en cinta alguna, cuestión llamativa dado el esperable éxito que tendría la suma del tirón de taquilla que ambos acreditan.