El precandidato del PAN a la alcaldía de Puebla, Eduardo Rivera Pérez se defendió de las críticas en su contra por pactar con el morenovallismo para obtener la posición, al asegurar que aunque se haya ido a otro partido también lo hubieran llamado “incongruente”.
En entrevista, el panista negó que haya acordado con el exgobernador Rafael Moreno Valle participar en el proceso electoral de este año y dijo que su decisión fue por congruencia.
Me han preguntado que me arreglé (con Moreno Valle), pero en otro caso que no hubiera participado me iban a cuestionar porque no participé (...) Es muy complicado este oficio político, cualquier decisión que hubiésemos tomado; si me hubiese ido a otro partido, la crítica sería la misma; que soy un incongruente por renunciar a mis principios”.
Rivera Pérez dijo que el PAN no es Moreno Valle ni Ricardo Anaya, pues el partido es “de todos los mexicanos”.
Sobre el apoyo que le negó PSI y Compromiso por Puebla, insistió que fue decisión de las dirigencias nacionales y estatales.
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Respecto al juicio de amparo que interpuso contra su inhabilitación, confirmó que en un plazo máximo de tres meses el juez Tercero de Distrito en Materia de Juicio de Amparo Civil, resolverá a su favor o del Congreso local, pero confió que la balanza se incline a él.
CENTRAL publicó que Eduardo Rivera selló por fin el pacto con el morenovallismo para contender por la alcaldía de Puebla en dupla con Martha Erika Alonso como la candidata al gobierno del estado. Para llegar a este punto en el que de nuevo trabajarán en alianza, el yunquista debió perdonar una serie de embates que sufrió por parte de Rafael Moreno Valle durante más de un sexenio.
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