Cuatro jóvenes fueron detenidos por miembros de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal de San Pedro Cholula durante el operativo alcoholímetro. Según videos que grabaron los jóvenes, hubo varios excesos de parte de los uniformados, quienes los golpearon, arrestaron y les robaron sus teléfonos celulares.
Los hechos ocurrieron alrededor de la una de la madrugada del sábado 17 de marzo, y de acuerdo a testigos y otros afectados, por lo menos hubo tres detenciones de este tipo contra jóvenes que se encontraban en los límites de San Pedro y San Andrés Cholula.
En un video entregado a PÁGINA NEGRA por los afectados, puede verse cómo los jóvenes solicitan a los policías que muestren el reglamento de tránsito.
Una joven que se encontraba en la parte trasera del vehículo exigió que le explicaran por qué debería bajar si no es la conductora, mientras que se alcanza a ver al chofer siendo esposado por tres policías.
Según explicaron, el conductor mostró los documentos pero no los entregó, hecho que molestó a los policías y por lo que estos comenzaron a insultarlo; en respuesta, el joven tomó su celular y comenzó a grabarlos. En ese momento fue que los uniformados comenzaron a violentarse.
Nos detuvieron a todos, incluso a los pasajeros. Nos golpearon y nos subieron a las patrullas, cuando llegamos a los separos vimos que había más gente que había sido golpeada y asaltada por los policías".
En otro caso del mismo operativo, una pareja fue abordada por los uniformados y también, con violencia, se les quitó el automóvil. Cuando al conductor se le retuvo, ella solicitó llevarse el automóvil pues podía manejar, sin embargo a los uniformados no les importó y la dejaron sola a mitad del camino.
Un tercer caso fue denunciado en redes sociales por el fotógrafo Memo Márquez, quien explicó que cuando iba caminando intentó ayudar a otros conductores que eran víctimas de la violencia e los uniformados.
Acabo de llegar a casa sano y salvo después de que sufrir agresiones por policías de retén de San Andrés Cholula, yo iba caminando como cualquier transeúnte, y vi los abusos que estaban haciendo contra unos individuos arrestados, unos chavos que estaban siendo violentados por parte de la policía de ahí. A la acercarme para ver qué estaban haciendo, estos policías carentes de cerebro me empujaron porque no podía acercarme y les pregunté que por qué estaban haciendo eso, ellos solamente me empujaron más me jalonearon y casi me tiran pero no pudieron, le dije que no podían hacerme esto y que no tenían ningún derecho de hacerlo ellos volvieron hacerlo empujando mi jalando y casi me tiran de nuevo, le dije a otro policía que si vio lo que me estaban haciendo, el otro incompetente dijo que no vio nada", relató en Facebook.
El fotógrafo prefirió irse del lugar y tomar UBER a su domicilio. Después, en redes sociales comentó la frustración de ver a tanta gente afectada y no poder hacer nada.
