Al morir Esteban Vélez, propietario de la Finca San José en Valsequillo, Rodrigo Rodríguez Rojas, su jardinero, incurrió en abuso de confianza y utilizó las huellas dactilares del cadáver para realizar contratos apócrifos de compra-venta, con los que vendió dos veces el inmueble.
Familiares de Esteban Vélez entregaron a PÁGINA NEGRA copia de los contratos falsos de compra-venta de la propiedad. En estos no aparece la firma del propietario fallecido y únicamente colocaron tres huellas dactilares con las que supuestamente se avaló la entrega de la Finca San José.
Los afectados fueron Miguel Enrique Mendieta Estandia y María del Carmen Hernández Espíndola. Los dos compradores fueron defraudados al final del 2017.
En el caso de Miguel Enrique Mendieta, fue defraudado con 250 mil pesos, pues en una negociación el jardinero recibió este dinero y el resto sería entregado en pagos.
En el caso de María del Carmen Hernández Espindola, el hombre le vendió la propiedad en tres millones de pesos, aceptando un primer pago de 600 mil. El resto, como en el caso anterior, sería entregado a plazos.
Sin embargo, a pesar de la entrega del dinero, la propiedad jamás fue puesta en manos de sus compradores.
En los contratos apócrifos se asegura que Rodrigo Rodríguez Rojas es el apoderado de la Finca San José, y que Esteban Vélez lo nombró como tal a través de un documento solamente firmado con sus huellas.
Esteban Vélez falleció el pasado 14 de noviembre del 2017, apenas unos meses después de contratar a la hermana de Rodrigo Rojas como cocinera.
La familia de Vélez teme que Rodríguez Rojas junto con su hermana hayan urdido un plan para envenenarlo, pues en cuestión de 30 días enfermó y murió.
Como PÁGINA NEGRA informó, el jardinero de la Finca San José fingió el secuestro de su sobrino de 8 años, esto como una artimaña para evitar que su familia fuera desalojada de la propiedad ubicada en la zona del Oasis Valsequillo cuando se comprobó que se habia adueñado de ella de forma ilegal.
Inicialmente los medios de comunicación reportaron las versiones de los familiares del niño, en donde señalaron que desapareció luego de que llegara “un grupo armado” a asaltarlos. También en redes sociales la familia admitió que el niño solamente “se estaba escondiendo después que escuchar una fuerte discusión”.
Rodrigo Rodríguez Rojas y su familia fingieron que el niño desapareció porque querían evitar el desalojo. Porque ya está en la propiedad toda su familia y no quieren salirse a pesar de que saben que no son dueños”, señalaron los cercanos a José Esteban Vélez.
El despojo de la Finca San José
De acuerdo a lo comentado por personas cercanas a José Esteban Vélez, en cuanto cayó este inconsciente, el jardinero y la cocinera utilizaron hojas en blanco para plasmar sus huellas dactilares y armar ahí un documento en el que Esteban les cedía los derechos sobre la propiedad. El documento fue utilizado para defraudar a los dos compradores.
En dichos papeles aparece como beneficiario Rodrigo Rodríguez Rojas, quien acudió a la Notaría Pública #17 en la ciudad de Puebla para certificar el documento. La gestora, Leonides Margarita Herrera Contreras fue quien realizó el trámite, a pesar de que el documento no era fidedigno.
Debido a esto se inició el procedimiento para buscar que el jardinero y su familia salgan de la finca, luego de dos meses de permanecer en ella. A decir de los vecinos, la misma propiedad se encuentra en mal estado por la falta de mantenimiento.
