Decía don Miguelito, mi adorado abuelito "Ahora sí quién sabe", "A ver de a cómo nos toca". Ahora comprendo sus sabías palabras y la importancia de las frases.
Una vez que el PRI ya eligió a su candidato al gobierno del estado, algo me queda claro, no habrá negociación y Enrique Doger Guerrero va con todo y a morir "políticamente hablando" en la raya.
Pero claro, del otro lado ni la panista Martha Erika Alonso ni el morenistas Miguel Barbosa se van a quedar con los brazos cruzados. Ya ayer vimos el primer ataque del senador hacia Doger Guerrero cuando lo llamó "chiquito" y refirió que creó una mafia en la BUAP cuando fue rector y por supuesto Doger reviró y le contestó.
Luego criticó a Martha Erika Alonso quien en una entrevista con el periodista Arturo Rueda también le contestó, lo que demuestra que la señora tiene carácter y no piensa dejarse. Lo que me hace pensar que se avecina una guerra sangrienta y al menos en el debate ganará el que tenga más habilidad para contestar y menos se enoje.
Pero otra cosa que me queda clara, es que el PRI no va a jugar a perder como en las elecciones pasadas, pues eligió a su gallo más competitivo y bravo y ha hecho una selección de candidatos a diputados federales muy fuertes que difícilmente se dejarán vencer.
En Huauchinango el empresario Ricardo Urzúa tiene amplias posibilidades de triunfo, me atrevería a decir que más que cualquier candidato que pongan del PAN, solo habrá que esperar a ver qué dice Morena.
En el distrito 2 de Zacatlán difícilmente alguien le hará sombra al alcalde de Chignahuapan Enrique Rivera. El distrito 3 de Teziutlán es uno de los que está bastante reñido, por el tricolor va una empresaria de nombre Karla Martínez Gallegos, quien tiene un liderazgo social bastante arraigado, pero se enfrentará a toda la estructura del panista Toño Vázquez encarnada en su hija.
En el distrito 4 de Ajalpan Néstor Camarillo la tiene más que asegurada, pues es un bastión del tricolor y tendrá toda la ayuda de Antorcha Campesina. En San Martín Texmelucan no la tendrá fácil la priista Janeth González quién. Ya fue diputada federal.
En el seis de la capital poblana, la antorchista Soraya Córdova irá un día de campo, en el 7 de Tepeaca el ex delegado de la Conafor y marinista Humberto Aguilar solo tiene que esperar a que su rival de Morena no le genere ruido.
El 8 de Ciudad Serdán estará casi perdido pues el alcalde Juan Navarro se enfrentará a Fernando Morales, hijo del ex gobernador Melquiades Morales. En el 9 de la capital el tricolor solo será espectador de la guerra entre Fernando Manzanilla por Morena y por el PAN Jorge Aguilar, quien por cierto es mi gallo.
En el 10 de Cholula el panorama luce imposible para la ex delegada del Trabajo, Vanessa Barahona, en el 11 de la capital Paco Jiménez igual la tendrá complicada aunque él le apuesta a su arraigo en las colonias populares.
En el 12 mi adorada Karina Romero puede ganar aunque no le será sencillo, el 13 de Atlixco igual será un día de campo para Juan Manuel Vega Rayet, así como el 14 de Acatlán para la cenecista Maritza Marín y el 15 de Tehuacán para el antorchista Lisandro Campos.
De acuerdo con estos liderazgos del tricolor, los priistas se podrían adjudicar hasta 10 distritos federales, pues son candidatos competitivos en la mayoría de los casos, con estructura y dinero.
Ninguno de ellos se arriesgará a perder ni se quemará como un candidato o candidata perdedor perdedora.
