Con más de 200,000 personas evacuadas, las autoridades de California declararon este jueves, por primera vez en la historia de la región, "alerta morada" en el sur de California.
Desde el lunes, el sur de California sufre los efectos de cuatro incendios que han sido avivados por la sequedad del terreno y vientos huracanados, con rachas de hasta 128 kilómetros por hora, que alimentan las llamas, haciendo casi inútiles las labores antiincendios.
Los Ángeles, 7 dic (EFE).- Vientos huracanados, con rachas de hasta 128 kilómetros por hora, alimentan hoy las llamas de los incendios que consumen amplias áreas del sureste de California y hacen casi inútiles las labores antiincendios en los alrededores de ciudades como Ventura, Santa Paula y Los Ángeles.
Al menos 4,000 bomberos están trabajando en toda la zona para tratar de contener las llamas, que se extienden por una superficie total de más de 32,000 hectáreas, según los bomberos de California (CalFire).
"Las perspectivas de contención no son buenas", dijo el jefe de bomberos del condado de Ventura, Mark Lorenzen, en una conferencia de prensa el martes por la noche. "Realmente, la madre naturaleza va a decidir cuándo tenemos la capacidad de apagarlo ... está presionando mucho".
Es poco probable que las condiciones mejoren tan pronto como esta semana. El Servicio Meteorológico Nacional espera que vientos fuertes regresen el jueves.
Las siguientes imágenes son evidencia de la devastación en California por los incendios forestales:
El fuego abraza establos de caballos tras un incendio en la madrugada del martes que se inició en el área de Kagel Canyon en el Valle de San Fernando al norte de Los Ángeles
Las llamas se extendieron en un valle con la ayuda de los vientos de Santa Ana, cerca de Ventura, California.
Un helicóptero contra incendios sobrevuela el Creek Fire mientras se pone el sol en Los Ángeles, California.
Uno de los incendios forestales quema a lo largo de una ladera, cerca de la carretera 126 en Santa Paula, California. El fuego de los arbustos, impulsado por los vientos huracanado arrasó con cerca de 10,000 acres en el condado de Ventura la noche del lunes, obligando a cientos de personas a huir de sus hogares.
La veleta de un rancho en el Valle de San Fernando, al norte de Los Ángeles.
Los bomberos luchan para salvar una de muchas casas consumido por uno de los incendios que se inició en el área de Kagel Canyon en el Valle de San Fernando al norte de Los Ángeles.
El incendio forestal abrazó un establo de caballos en el área de San Fernando al norte de Los Ángeles.
Un vehículo pasa a través de las brasas después de un incendio en la madrugada que se inició en el área de Kagel Canyon en el Valle de San Fernando al norte de Los Ángeles.
Un hombre local reza durante un incendio.
Un equipo de bomberos conduce a lado de una casa en llamas.
La autopista es abrazada por las llamas del incendio forestal.