Ya es media noche, y aunque el día fue un “desastre”, no se compara a tu descanso; dar vueltas sobre la cama hasta lograr conciliar el sueño. Algo agotador, cuando se tiene entre siete a cuatro horas para dormir...
Situación, que, sin duda, amerita una solución rápida: El método “4-7-8”, una técnica de respiración que permite calmar la mente y los músculos.
Efecto que se logra a través de llenar los pulmones de aire, aumentando así el de flujo de oxígeno en todo el cuerpo”, afirma, Andrew Weil, fundador del Arizona Centre for Intergrative Medicine at the University of Arizona.
¿Cómo se realiza?
Mientras estás en la cama:
1. Mantén la punta de la lengua detrás de los dientes frontales superiores.
2. Inhala silenciosamente por la nariz y sopla el aire con fuerza por la boca (realízalo por 30 segundos).
3. Repite por tres ocasiones.
De acuerdo a Weil, la respiración profunda puede alterar inmediatamente el ph de la sangre y reducir la presión arterial; lo que reduce el estrés.
¡Dulces sueños!