Feminicidios

Sangre de Gaby en la ropa de Javier Maldonado lo incrimina; lo vinculan a proceso por feminicidio

- Foto: Especial

La parte acusadora presentó pruebas de la vestimenta del imputado y los testimonios de amigos y conocidos quienes lo señalaron como una persona violenta

Por Karen Meza/ @KareMeza_

/ Puebla, Puebla

Francisco Javier M tenía manchada su ropa de sangre cuando fue detenido por los agentes ministeriales que junto con sus padres encontraron el cuerpo inerte de María Antonia Ruiz Bautista mejor conocida “Gaby”, en la colonia El Valle del municipio de Puebla.

En la audiencia inicial realizada este martes, el imputado fue vinculado a proceso por el delito de feminicidio tras la presentación de diversas pruebas que van desde el testimonio de su familia, amigos así como sus vecinos que lo describieron como una persona violenta y enferma de celos.

En la sesión que duró casi tres horas, estuvo presente la madre así como la hermana del detenido, el juez David Rodríguez González, quien determinó una amplia investigación contra Javier quien seguirá preso en el penal de San Miguel como medida cautelar.

El 11 de enero, PÁGINA NEGRA  reveló que Francisco Javier Maldonado y su pareja Gabriela Bautista bebían dentro de su casa en la colonia Del Valle, en Puebla. Los hechos ocurrieron el pasado 7 de enero tras discutir, el hombre de 33 años golpeó a Gabriela, la degolló y la dejó envuelta en una sábana tirada en el piso de su habitación. Ambos se encontraban en estado de ebriedad.

VER: “La maté porque ella me provocó”: confesó el feminicida de Gabriela Bautista

De acuerdo a la carpeta de investigación, se dio a conocer que Javier vestía de una chamarra y pantalón de mezclilla y que fue su madre, María Luisa Soriano, quien descubrió que su ropa tenía sangre.

También se dio a conocer que antes de la muerte de “Gaby” no fueron tres sino cinco personas las que estuvieron consumiendo tequila y que dejaron a la pareja solos en la vivienda, sin conflictos.

Los testigos señalaron que Javier era una persona violenta, por ejemplo, vecinos comentaron que escuchaban las ofensas contra Gaby, sus sobrinas que dijeron que si había maltrato físico y sus padres que eran testigos que siempre tenían conflictos de pareja.

Irving y Julio César, hijo de la víctima, también refirieron había amenazas en contra de su madre y que en la última llamada telefónica, pidió ayuda para salir de la vivienda pues le tenía miedo a Javier, quien además le quitaba los ingresos que juntaba en el bar “La Santita”, donde trabajaba de mesera.

A todo esto se sumó el testimonio de su primera esposa, la cual confirmó que en 2010 vivió en pareja con Javier y lo dejó por violento, pues le propinaba golpizas sólo porque no le hacía de comer. En 2015 regresaron y vivieron en Tehuacán, de donde es oriunda la mujer. En abril de 2016 la relación terminó cuando Javier golpeó a la su esposa y la amenazó con matar.

En respuesta, el abogado de oficio de Francisco Javier señaló que todas las pruebas no estaban sustentadas y se basaban en los dichos de sus conocidos, además cuestionó la falta de una denuncia formal ante las autoridades por las lesiones que recibió.

Además de que no se puede acreditar si Javier es el autor del asesinato de Gaby, pues se encontraba en estado de ebriedad cuando supuestamente le confesó a su padre lo que había ocurrido.

El litigante además dijo que no hay testigos de que él pudiera cometer el crimen y que en si en algún momento le advirtió a Gaby “que la iba a matar”, no era en tono de amenaza, sino un término coloquial que expresaba cuando estaba enojado.

Al final, el juez consideró las declaraciones como “indicios razonables” de que Javier sea el asesino, aunque dijo que se necesitan más pruebas para culparlo por este delito, por lo que extendió un periodo de cuatro meses para investigarlo.

Hasta el 18 de mayo, la Fiscalía General del Estado de Puebla deberá presentar pruebas y realizar investigaciones complementarias para culpar a Javier por feminicidio, sustentando que hubo daños en razón al género.