Feminicidios

Joven de 21 años mata de un balazo a su esposa de 18… ¡que estaba embarazada!

- Foto: Letra Roja.

Verónica era una niña de casa, no andaba en la calle, era muy alegre, estaba estudiando en el Colegio de Bachilleres.

Por Letra Roja.

/

El pasado 5 de julio Verónica Paredes Milla, de 18 años de edad, fue asesinada de un balazo en Cuernavaca, Morelos; su asesino fue su marido, un joven de 21 años de edad.

Verónica era una niña de casa, no andaba en la calle, era muy alegre, estaba estudiando en el Colegio de Bachilleres. En cuarto año comienza a volverse muy rebelde, por lo que en junio de 2016 Verónica decide irse a vivir con su papá.

Ya con él, ella salía más y tenía mayor libertad. En Septiembre u Octubre conoció a Zoare Eduardo Montoya Pérez, de 21 años, por Facebook y en Diciembre de ese mismo año se fue a vivir con él.

En enero de este año quedó embarazada, en marzo regresó con su mamá para comentarle que estaba embarazada y que estaba próxima a casarse, por lo que la comunicación con su madre continúa, pero el semblante de Verónica había cambiado ya que se le veía cansada y muy demacrada.

La madre de Verónica recuerda que ella le comentó que se regresara a su casa que no importaba que estuviera embarazada, que ellos la apoyarían, pero ella se rehúsa y sigue con su pareja.

Después del reencuentro, los días miércoles y jueves, Verónica se la pasaba en casa de su madre, ella la llevaba al doctor para que le diera vitaminas y a que continuara su tratamiento porque tenía una infección en la piel.

Su madre seguía insistiendo en que Verónica regresara a casa y tiempo después ella dice que sí, que cumpliendo los seis meses de embarazo se regresaría a vivir con ella.

El 20 de junio, Verónica se casa por lo civil y aquel día su madre recuerda, con lágrimas en los ojos, que no sabía si llorar de tristeza o felicitarla.

Aquel día le di un abrazo y le dije que no olvidara que siempre contaría con ella”, cuenta la mujer.

Días después y en las visitas que le hacía a su madre, Verónica le comenta que no podía regresarse a vivir con ella, ya que si ella se regresaba, Zoare la iba a matar. Su madre le dice que no diga tonterías y después Verónica le indica que es broma.

El 5 de julio, Verónica tenía seis meses de embarazo. Ese día ella le escribió a su madre para saber qué haría, pero su madre desafortunadamente no pudo ver el mensaje a tiempo.

Verónica siempre me escribía: Mamá voy a ir a la casa, vas a estar ahí. Pero ese día a las 8:51 me escribió: Mamá, qué vas a hacer hoy.

Para mi mala suerte o para mi desgracia le quité el volumen a mi teléfono y no lo pude ver a tiempo. A las 10:20 cuando desperté le respondí: Qué pasó bebé me acabo de despertar.

Por mi mente pensé que Verónica quería que fuera por sus cosas. Tiempo después me doy cuenta y veo que tengo varias llamadas de un número que no conozco, devuelvo la llamada y me indican que tengo que ir de urgencia al hospital, pero nunca me dicen el motivo del porqué mi hija se encontraba ahí”, indica la mujer.

Al llegar le informan que Verónica recibió un balazo en el hombro y ahí le informan que la habían intervenido y que ya habían detenido la hemorragia, de hecho le hicieron una cesárea para salvar al bebé, pero lamentablemente la bala rebotó internamente y le rebanó el hígado, le desprendió la placenta y le dio en una arteria del corazón, por lo que la joven sufrió varios paros cardiacos.

El bebé falleció a las 3:30 de la tarde, sobrevivió sólo tres horas, para ese entonces Verónica ya estaba muy fría, no tenía color y falleció cuatro horas después.

Todavía el hombre que la asesinó, la llevó al hospital y ahí fue donde lo detuvieron. Al pedir los paramédicos los datos de familiares a Verónica ella les dio los de su madre y refiere que tuvo una discusión con su pareja y que él le disparó.

A las 9:40 Zoare publicó en el muro de Verónica gracias por estar conmigo bebé y después él escribió en su Facebook lo siguiente:

La madre de Verónica pide justicia ya que no puede quedar impune la muerte de su nieto, ni de su hija. Hasta el momento Zoare está detenido por feminicidio, pero no por el asesinato de su propio hijo, por lo que la mujer pide a las autoridades prestar atención al caso y que no lo dejen libre.

Letra Roja.