Miguel Bravo, pastor evangélico pentecostés de la iglesia Alfa y Omega “Cristo Roca de Tu Salvación”, ofreció a su hija embrazada a cambio de saldar las deudas adquiridas con sus feligreses, a quienes defraudó con la construcción de un templo, esto en el municipio de Tehuacán.
Desde hace años, “el hermano Miguel” pidió 100 mil pesos a una familia, asegurando que le pagaría intereses por ese dinero. Después, con el pretexto de la construcción del templo, el pastor y su mujer, de nombre Virginia Gregorio, siguieron pidiendo dinero. Dicha construcción quedaría ubicada en el callejón San José, de la avenida Nacional de San Lorenzo Teotipilco, lugar que es propiedad de Bravo.
Los fieles se percataron que las deudas adquiridas por Miguel comenzaban a crecer, decidiendo entonces pedir cambio de pastor. Sabiendo esto, algunos comenzaron a cobrarle el dinero prestado; sin embargo, Bravo les dijo que no deberían preocuparse pues él, aunque ya no fuera el titular, no dejaría la iglesia.
Información proporcionada por testigos indica que hace tres meses, Bravo ofreció a su hija menor de edad, quien estaba embrazada, a cambio de solventar la deuda, que ya para entonces superaba los 200 mil pesos. Ante la negativa de los fieles, Miguel Bravo y su familia desaparecieron de la población.
Los afectados solicitan ayuda para encontrar al ex pastor, pues no dudan que sea capaz de vender a su nieta; además de que quieren advertir a otros para que no se dejen sorprender por esta persona.
David García, actual encargado de esta iglesia, dijo que Miguel Bravo hizo tratos con personas ajenas a la iglesia, además de que nunca fue removido del cargo y que simplemente desapareció, también que han emitido la alerta a otras iglesias.
Recientemente, PÁGINA NEGRA informó que el cura Alfredo Valencia González y su secretario particular, Angelino Guzmán Palma, encargados de la parroquia de San Nicolás de Tolentino, fueron denunciados por varios fieles debido a que han cometido una serie de irregularidades, malos tratos y desfalcos.
En una carta enviada al Arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espino, pobladores de Huehuetlán El Chico se quejaron de que el prelado y su secretario mantienen políticas que provocan desconfianza y enojo entre los creyentes, tales como pedir cifras exorbitantes por servicios religiosos, donde incluso han llegado a cobrar hasta 700 pesos por confesiones.
VER: ¡Estafador! Párroco de Huehuetlán el Chico cobra 700 pesos por confesiones
Con información de El Sol de Puebla.