Familiares de los seis jóvenes desaparecidos en Lomas de San Miguel a finales de 2015, están seguros de que el empresario Jorge Aduna Villavicencio es culpable y exigen que diga dónde se encuentran los restos de sus hijos. Además denunciaron que tanto la Fiscalía General del Estado como el Tribunal Superior de Justicia les ocultan información sobre las investigaciones y el proceso legal.
En entrevista con PÁGINA NEGRA, las madres y una de las esposas de los seis levantados —quienes pidieron no revelar sus identidades— detallaron que de los funcionarios de la Fiscalía General del Estado (FGE) solamente han tenido malos tratos y jamás les han aportado información fidedigna que les confirme que encontraron los restos de sus familiares.
Como informó este diario digital, entrevistado dentro del penal de San Miguel, el empresario Jorge Aduna Villavicencio negó encontrarse detrás del plan para secuestrar, descuartizar y desaparecer a sus hijos.
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Tras las declaraciones, los familiares de los muchachos desaparecidos se mostraron incrédulos e incluso le recriminaron “por robarle la paz a sus vidas”.
Yo creo que palabras sobran para explicar la situación que vivimos. Aunque él quiera dejar la cárcel no lo puede lograr. Aunque aviente el dinero que tenga, la felicidad no la tiene. Y nos robó la paz de nuestras vidas por estar recordando día a día desde el momento en que levantan a nuestras personas queridas”, comentó la esposa de uno de los desaparecidos.
“Que se ponga en nuestro lugar”
Incluso, los familiares exigieron que Aduna se pusiera en su lugar y que recordara que él mismo había perdido a un hijo en un accidente y que siempre ordena que le dejen flores cuando ellos no tienen una tumba a dónde acudir a llorar.
Día a día le van a prender veladoras a su hijo. Antes de que se marchiten las flores le van a poner flores frescas. Y nosotros a dónde vamos a ponerle flores a nuestro familiares”.
Entre el 19 de octubre y el 27 de noviembre del 2015 desaparecieron Marco Antonio Cuautle Cuautle, Román Limón Gómez, Pedro Negrete Orea, Luis Ángel Flores Gutiérrez, Rogelio Rivera Osorio y finalmente Bryan Gerardo Torres Sandoval.
El 20 de febrero del 2016 la Fiscalía General del Estado informó que el empresario Jorge Aduna Villavicencio mandó a matar a los seis jóvenes que fueron “levantados” en Lomas del Sur. La versión oficial indica que los muchachos fueron prácticamente cazados por las escoltas de Aduna, descuartizados, incinerados y sus restos tirados a una coladera.
La dependencia confirmó que algunos de los desaparecidos participaron en el robo a casa habitación con violencia de un domicilio de los familiares del empresario pero que el hecho nunca fue denunciado.
El caso en contra del empresario ha perdido fuerza puesto que los familiares de los seis desaparecidos acusan que hasta el momento carecen de pruebas de ADN así como indicios fidedignos para confiar en las autoridades.
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Las familias de los seis jóvenes desaparecidos no han recibido hasta la fecha la confirmación de dónde se encuentran los restos de los jóvenes y solamente han visto indicios en fotografías, la mayoría de ellos ropa.
El 20 de abril del 2017, por la noche fueron liberados los policías ministeriales Javier Cruz Ventura y José Felipe Riveros Hernández, acusados de ser cómplices del empresario.
Recientemente el Juez Cuarto de lo Penal, Marcelino Romero de Jesús, dictó un nuevo auto de formal prisión en contra del empresario gallero Jorge Aduna Villavicencio a pesar de que el Segundo Tribunal Colegiado otorgó un amparo para efectos de que se dictara una nueva resolución.
“Queremos justicia”
En entrevista con PÁGINA NEGRA los familiares de los seis jóvenes indicaron que el 18 de febrero del 2016, el día que les informaron que habían detenido a Jorge Aduna Villavicencio y seis personas más por la muerte de sus hijos, fue el primero y último que los recibieron los servidores públicos de la Fiscalía General del Estado.
No volvimos a saber de Fiscalía. Solamente nos dijeron que esas personas ya habían declarado que habían matado a nuestros familiares. Fue la primera y última vez que supimos de la Fiscalía (...) No nos entregaron nada. Nos enseñaron fotografía pero por teléfono. No había nada. Nada”, comentó una de las madres de los jóvenes.
–¿Creen que Aduna sea culpable de la desaparición de sus hijos?
–Claro que sí. Para empezar todo lo que supuestamente encontraron fue en una bodega de su propiedad. Yo creo que sí está involucrado.
–¿Qué les han dicho en el Juzgado Cuarto de lo Penal?
–El Ministerio Público adscrito al Juzgado Cuarto de lo Penal nos dijo que Aduna había metido un amparo y se lo aceptaron y estaba por definirse si se queda preso o se va libre.
–¿Les dijeron que todavía hay posibilidad de que salga libre?
–Sí, yo creo que sí. Con tanto dinero que tiene maneja a todo mundo.
–¿Qué le pedirías a las autoridades, al juez sobre el caso de tu hijo?
–Justicia. Que se haga justicia, conforme a la ley. Es lo único que pido. Y que esta persona diga en realidad qué hicieron con él, qué hicieron con mi hijo. Con el juez no hemos hablado. La última vez hablé personalmente con él, por lo mismo que no nos dan avance, nos dijo que qué más pedía yo si Aduna ya estaba preso. Y como he metido varias quejas me dijo que ya no anduviera metiendo tantas quejas. Porque por más quejas que meta no nos van a hacer caso.