Seis de cada diez mexicanos consideran que hubo fraude electoral en las recientes elecciones de Coahuila y Estado de México, de acuerdo con la última encuesta de Parametría.
El 47% de los entrevistados dijo que las votaciones en Veracruz no estuvieron apegadas a la legalidad. La elección percibida como la más limpia fue la de Nayarit con 40% de personas que así lo mencionaron.
Tanto en las elecciones del Estado de México como en Coahuila se argumentó que debido al rebase de gastos de campaña tendrían que anularse ambos procesos, esta nueva causal fue producto de la reforma electoral de 2014.
En la opinión pública mexicana siete de cada 10 personas consideran que la disposición para anular una elección cuando se rebase el tope de gastos de campaña ha perjudicado a la democracia en México en lugar de beneficiarla.
Esta opinión ha ido en aumento desde hace tres años, se registra un incremento sobre todo entre 2016 y 2017 cuando aumentó 20% quienes así lo mencionaron.