Con cicloestaciones incompletas y pocas bicicletas comenzó a operar Bici Puebla, luego que se anunciara que este 28 de enero se pondría en marcha la primera etapa del sistema de bicicletas públicas con mil 50 unidades y 69 cicloestaciones.
En un recorrido realizado por CENTRAL, se pudo observar que en los kioskos instalados en el primer cuadro del Centro Histórico se colocaron solo de dos a tres unidades cuando en cada estación caben 15 bicicletas.
Los kioskos ubicados sobre la 4 poniente a la altura de la 5 de Mayo y 5 norte tenían tres y cuatro bicicletas ancladas respectivamente. La gente observaba los requisitos para poder utilizarlas y miraba las bicicletas, sin embargo desconocían si ya estaban operando al 100 por ciento.
Las cicloestaciones que no tenían bicicletas eran las ubicadas en la 3 sur y 7 poniente, y la del callejón atrás del edificio Carolino de la BUAP, donde incluso tenía una lona de los comerciantes que venden sus artesanias los fines de semana.
Respecto a las dos cicloestaciones ubicadas sobre la 3 oriente, una a la altura de Analco, también solo contaban con tres bicis y la otra afuera de la Universidad Angelópolis era la más precaria, pues los bolardos a su alrededor estaban dañados y solo tenían dos unidades y nisiquiera había información sobre el uso del sistema.
El secretario de Desarrollo Urbano, Gabriel Navarro Guerrero aseguró que este sábado estarían completas y funcionando las 70 cicloestaciones, sin embargo la única con las 15 unidades era la del Zócalo de la ciudad donde había supervisores, pues las demás se encontraban totalmente vacías.
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Incluso, una de las personas que se encontraban en la estación señaló que "a partir de hoy ya no iban a ser gratis", esto mostrando una falta de información por parte de la empresa, pues hace una semana el alcalde municipal anunció las medidas de compensación.
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El proyecto ha causado polémica desde la entrega de la conseción a la empresa estadounidense CycloShare, propiedad del empresario Ricardo Pierdant, pues estableció cláusulas abusivas para proveer el servicio de bicicletas públicas en el municipio de Puebla.
De acuerdo con el contrato de 10 años la empresa podrá explotar durante este tiempo la venta de los espacios publicitarios, estará exenta del pago de derechos, no deberá entregar alguna contraprestación al Ayuntamiento de Puebla, tiene la opción de extender a 20 años la concesión y la posibilidad de vender toda su infraestructura al gobierno a precio comercial una vez que termine el contrato.
Además, ofrecerá el servicio amás caro del país, pues la anualidad es de 700 pesos mientras en ciudades como Guadalajara y México es de 365 y 400 pesos al año.