En 2011, el Partido Acción Nacional (PAN) llegó al Gobierno de Puebla como alternancia y con la promesa de un cambio real para sus ciudadanos, después de más de 80 años en que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) estuviera a cargo de la entidad.
Fue Rafael Moreno Valle Rosas quien encabezó el cambio de poder, pero también fue el mandatario que seis años después dejaría a la entidad con una deuda pública histórica. Ahora, Antonio Gali Fayad , también panistas y con poco más de tres meses al mando del Gobierno estatal, paga por los errores de su antecesor.
En los 22 meses en que estará al frente de la administración –por el ajuste de las candidaturas para 2018– enfrentará aún más problemas, pues los que hoy han puesto a Puebla en la mira nacional, no son los únicos que su antecesor le dejó como herencia.
DEUDA DE GOBIERNO A GOBIERNO
Rafael Moreno Valle heredó a Antonio Gali Fayad una deuda de 23 mil 97 millones de pesos, de acuerdo con el informe de 2016 publicado en el portal de Transparencia, que contiene el desglose de los gastos directos, indirectos y otros pasivos durante la administración estatal del sexenio que culminó el 31 de enero de este año.
Sin embargo, en estos 23 mil 97 millones de pesos no se encuentran contabilizados los Proyectos para la Prestación de Servicios (PPS) del Museo Internacional Barroco (MIB) y del Centro Integral de Servicios (CIS), que ascienden a 11 mil 80 millones de pesos, debido a que corresponden a “gasto corriente”, así lo informó el Secretario de Finanzas y Administración (SFA), Raúl Sánchez Kobashi.
Sumando el llamado “gasto corriente”, la “transformación” de la entidad le estaría costando a los poblanos 34 mil 177 millones de pesos.
Lo que ahora sería una mayor deuda a la reconocida por Moreno Valle, Antonio Gali no la acepta así. En entrevista con medios, cuando recién tomó posesión, el Gobernador declaró que los 23 mil 97 millones de pesos “están y constan en el gasto corriente de la Federación; es decir, vienen implícitos en el presupuesto de egresos de la Federación […] Están contabilizados para que se realice el pago por los mismos, por eso no se catalogan como deuda”.
De acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), durante los dos primeros meses de Gali se registraron 131 homicidios dolosos: 56 en febrero, el mes que tomó posesión, y 75 en marzo, el último mes del que se tiene registro en esa base de datos.
En cuanto a secuestros, se registraron cuatro en el mes de febrero. Y en el caso de delitos sexuales –crimen que va a la alza en Puebla– se registraron 114 violaciones, 52 en febrero y 62 en marzo.
En comparación con el mismo periodo, cuando Moreno Valle tomó posesión del cargo como Gobernador en febrero de 2011, los homicidios dolosos de febrero y marzo sumaron 1,706. En secuestro, se registraron seis casos: uno en febrero y cinco correspondientes a marzo.
En cuanto a delitos sexuales se reportaron un total de 140 casos: 72 violaciones en febrero y 68 en marzo.
LOS HUACHICOLEROS NO SON NUEVOS
Los huachicoleros son gente de campo, que tras no encontrar el dinero suficiente para dar de comer a sus familias decidieron irse por lo ilegal, donde sí obtienen ganancias. No son sólo los padres de familia, son las madres, los hijos y el pueblo entero que los protege porque dependen de esa fuente de ingresos, pues más del 70 por ciento de la gente de estos municipios vive en la miseria.
El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) coloca a Puebla capital como el municipio con mayor número de pobres no sólo del estado sino del país, con 732 mil 155 personas, el 39 por ciento de su población total.
El robo de combustible en México genera pérdidas de entre 780 millones de dólares y mil millones de dólares anuales, y en el delito pueden estar involucrados trabajadores de Petróleos Mexicanos (Pemex), así lo refirió el Secretario de Hacienda, José Antonio Meade.
Y aunque el tema de los huachicoleros ya es “añejo”, como lo declara Secretario de Defensa Nacional de México, Salvador Cienfuegos, en días pasados, el problema tomó relevancia el 3 de mayo pasado, cuando cuatro militares y seis civiles perdieron la vida en un enfrentamiento en el poblado Palmarito, mientras elementos del Ejército acudieron a investigar una toma clandestina y fueron recibidos a tiros por los ladrones de combustible.
El asunto derivó en otra crisis de seguridad para el Gobierno federal y el Ejército. El mismo General Cienfuegos acusó a los estados, en este caso Puebla, por la omisión en el caso de sus gobernantes.
Durante su administración, Rafael Moreno Valle mandó a construir seis arcos de seguridad en diferentes salidas para blindar el estado que tuvieron un costo de 721 millones de pesos al erario. Sin embargo, esta obra no funcionó, la seguridad que proporcionarían estos arcos fue burlada por huachicoleros, ladrones de transporte de carga y delincuentes a través de caminos alternos que han sido usados desde su creación para evitar ser detectados.
Un ejemplo de lo anterior ocurrió el pasado 2 de mayo donde una familia fue víctima de la delincuencia en la México-Puebla, autopista supuestamente blindada por el arco de seguridad de San Martín, cuando regresaban de la Ciudad de México y fueron atacados por ocho sujetos para robarles su camioneta.
Cuando al padre se resistió al asalto, los delincuentes abusaron sexualmente de su esposa y de su hija de 14 años de edad, mientras que a su bebé de tan sólo dos años lo mataron.
Pero, MorenoValle no se pinta solo en las obras, Antonio Gali Fayad, anunció que el bajo puente de la autopista México-Puebla será ampliado para agilizar la circulación vial, por lo que la ciclopista, de un costo de 150 millones de pesos y creada por OHL de México y Pinfra, será demolida.
Esta obra sería señalada como una estrategia para obligar a los automovilistas a usar el segundo piso de la autopista, debido a que haría más lenta la circulación y quienes quisieran ahorrar tiempo tendrían que pagar el peaje.
FEMINICIDIOS A LA ALZA
Los feminicidios es un problema heredado de administración en administración panista. Sólo en 2016, ninguno de los sujetos detenidos y acusados de cometer este crimen fue sentenciado, así lo recoció a principios de este año el titular de la Secretaría General de Gobierno, Diódoro Carrasco Altamirano. Además de los 59 casos de este tipo registrados sólo se detuvieron a 27 presuntos responsables.
Una cifra que contrasta con la realizada por el Periódico Central, que registró 81 crímenes contra mujeres, de los cuales el 50 por ciento fueron realizados por las parejas sentimentales de las víctimas. Ese año destacó por ser el de más crímenes de odio contra mujeres en la entidad.
No obstante, 2017 podría llevarle ventaja puesto que en lo que va del año se han registrado 40 casos.
El último de los casos se ejecutó el sábado 13 de mayo, una mujer de 76 años de edad fue asfixiada con una almohada al interior de su domicilio en el municipio de San Martín Texmelucan. Su hija al no saber de ella decide ir a buscarla a su casa, al encontrarla en ese estado inmediatamente llamó a servicios de emergencias, pero al arribar al lugar de los hechos sólo pudieron confirmar su muerte.
Las historias son muchas, mujeres encontradas con el rostro desfigurado, cuerpos semienterrados, desnudos, quemados, maniatados, perforados por algún disparo o apuñalados.
Son crímenes impunes, delitos de los que no se sabe el final e historias que a las autoridades y a los gobiernos poblanos no les interesa investigar o pensar en activar una Alerta de Género.
La ciudadanía de Puebla tiene una pesada carga en los hombros que va en incremento, pues Rafael Moreno Valle no sólo extendió su propaganda por todo el estado y el país –con el posible uso de dinero del erario público, como acusa la oposición– sino también se le se acusa de incentivar el robo de combustible al no atacarlo en su momento y propiciar condiciones favorables para los campesinos.
Y aunque Antonio Gali Fayad niegue la intervención de la anterior administración en su Gobierno, lo cierto es que en sus primeros meses el panista no ha cambiado nada de lo que le heredó Moreno Valle y hasta protege sus pasos, como ya denuncian activistas e investigaciones periodísticas.