Tim, un perro residente de Estados Unidos, saltó a la fama luego de idear un plan perfecto con el que alcanzó su juguete.
El can no quería mojarse, pero se moría por alcanzar su pelota, así que tomó una tabla de surf, se trepó en ella y con sus patitas llegó hasta su preciado tesoro.
El mejor surfista del mundo recibió cientos de aplausos por parte de usuarios de redes sociales.