Thursday, 25 de April de 2024

Crimen y Castigo

Fiscalía se niega a revelar pruebas de ADN de los seis jóvenes asesinados por Aduna

- Foto: Especial

Han pasado 10 meses desde que el empresario fue encarcelado por ser el autor intelectual del homicidio de los jóvenes, quienes fueron quemados, descuartizados y tirados en coladeras. Los familiares acusan bloqueo de información y malos tratos 

Por Edmundo Velázquez / @MundoVelazquez / / Puebla, Puebla

La Fiscalía General del Estado de Puebla se ha negado a entregar las pruebas de ADN de los seis jóvenes asesinados cruelmente a finales de 2015 por el empresario poblano Jorge Aduna Villavicencio.  Isabel Sandoval, madre de uno de ellos denunció que el juez Marcelino Romero la ha amedrentado para que desista del caso y “se conforme con que el homicida está en la cárcel”.

En entrevista con PÁGINA NEGRA, la madre de Brayan Gerardo Torres Sandoval acusó que la única prueba que tiene de que su hijo fue asesinado son las fotografías que le enseñó la Fiscalía con los restos supuestamente de su hijo y el informe de que la ropa coincidía con la que usaba el día que desapareció, sin embargo no hay pruebas científicas que lo corroboren.

Isabel Sandoval acusó que ella y los padres de los otros jóvenes son amedrentados por el juez Cuarto de lo Penal, Marcelino Romero de Jesús, quien incluso los ha intentado convencer de que se olviden del caso y dejen de insistir en las pruebas y la sentencia contra el empresario.

Estamos desesperados. No hemos recibido ningún informe que confirme que los restos son de nuestros hijos. Nos los enseñaron únicamente por fotografías a través de un teléfono y ya no nos reciben los encargados de la investigación”. 

Fue en febrero de 2016, cuando la Fiscalía anunció la detención del empresario poblano, luego de que en un cateo en su bodega en la zona norte de la ciudad de Puebla y los límites con Tlaxcala fueran hallados los restos de sus hijos, desaparecidos entre octubre y noviembre, quienes supuestamente fueron cazados por los escoltas de Aduna en venganza por haber asaltado y violado a un miembro de su familia.

VER:Jorge Aduna se equivocó: en su venganza calcinó a dos hombres INOCENTES

Según Isabel Sandoval, hace dos meses la Fiscalía de Investigación a Secuestro y Delitos de Alto Impacto (FISDAI) dejó de recibir a los padres de los muchachos asesinados:

Llevo meses sin que me den copias del expediente. Incluso el juez se ha portado muy grosero conmigo. No sé si quiere que desista del caso, no sé si ese señor Aduna tenga tanta influencia y quiera que no siga esto. Pero no me dicen nada. El juez me dijo que qué más quería, que ya estaban en la cárcel”,

Isabel Sandoval, incluso, presentó una queja ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Puebla el 1 de agosto en donde señala los maltratos del juez del Cuarto Juzgado de lo Penal.

La madre de Brayan se comunicó con este periódico digital luego de que esta semana se documentó que Jorge Aduna vive con privilegios dentro del penal de San Miguel, pues el director y los custodios le permiten ingresar alcohol, prostitutas y vivir en una cómoda suite en el área de visita íntima.

VER:Aduna impone su ley: arma borracheras y le llevan prostitutas al penal de San Miguel (VIDEO)

Una cacería

Entre el 19 de octubre y el 27 de noviembre del 2015 desaparecieron Marco Antonio Cuautle Cuautle, Román Limón Gómez, Pedro Negrete Orea, Luis Ángel Flores Gutiérrez, Rogelio Rivera Osorio y finalmente Bryan Gerardo Torres Sandoval, el hijo de Isabel Sandoval.

El 20 de febrero del 2016 la Fiscalía General del Estado informó que el empresario Jorge Aduna Villavicencio mandó a matar a los seis jóvenes que fueron “levantados” en Lomas del Sur. Los muchachos fueron cazados por las escoltas de Aduna, descuartizados, incinerados y sus restos tirados a una coladera.

La dependencia confirmó que algunos de los desaparecidos participaron en el robo a casa habitación con violencia de un domicilio de los familiares del empresario pero que el hecho nunca fue denunciado. En las investigaciones la Fiscalía General del Estado determinó que Román Limón y Marco Antonio Cuautle no participaron en el atraco contra la familia Aduna y ni siquiera tenían relación con los otros cuatro delincuentes.

Aduna fue señalado como autor intelectual, pero hasta el momento en los procesos penales 76/2016 y 77/2016 solamente se le acusa de secuestro agravado. Los otros detenidos por el caso son el ex policía ministerial Ricardo López Meza, quien ordenó la búsqueda y desaparición de los jóvenes; el ex agente de la Agencia Federal de Investigación (AFI), Yosafhat Berlanga Flores y los escoltas Alejandro Páez Valenzuela y José Emanuel Limón Meneses, quienes trabajaban bajo las órdenes directas de Aduna.

 

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