Más de dos años han pasado desde que María Fernanda Montes, de solo 14 años de edad, fue encontrada muerta supuestamente asesinada a manos de su novio y la Fiscalía General del Estado mantiene el caso impune. No hay detenidos por el feminicidio ni una explicación a la familia de la menor sobre lo que le sucedió a su hija.
El 27 de noviembre de 2013, María Fernanda desapareció de su casa, era cuidada por su tía, ella la dejó sola un momento y cuando regresó ya no estaba ahí. Su desaparición fue reportada de inmediato a las autoridades y el 30 de noviembre encontraron su cadáver en un terreno baldío de la colonia El Refugio.
Los restos de la niña fueron encontrados en bolsas de plástico, estaba semidesnuda y el cuerpo presentaba señales de abuso sexual. La necropsia determinó que murió a golpes y el principal sospechoso fue, según la familia, su exnovio. La agencia del Ministerio Público inició la averiguación previa 102/2013 de la Agencia Especializada en Homicidios para investigar el caso, que sigue sin resolverse.
El caso de María Fernanda fue uno más de los expuestos en la marcha del pasado 25 de febrero en la que exigió el cese a los feminicidios en el estado. En la movilización Teresa Montes, madre de María Fernanda, aseguró que desde un inicio que pidió ayuda encontró solamente discriminación de parte de las autoridades. Incluso acudió en primera instancia con la Policía Municipal de Puebla en donde dijeron que no se preocupara puesto que su hija seguramente “se había ido con el novio”.
Un día después acudió a la entonces Procuraduría General de Justicia para denunciar la desaparición de María Fernanda. Tras levantar la denuncia tampoco fue iniciada la Alerta Amber y unos días después fueron encontrados los restos de su hija. Hasta la fecha no ha tenido avance alguno de las autoridades poblanas.
Pedimos justicia (…) Voy y siempre me dicen lo mismo: que sigue la investigación. Yo lo único que pido es justicia. A mi niña me la quitaron de 14 años, el novio me la mató, me la mató muy feo”, dijo Teresa Montes al momento de relatar su historia ante los asistentes a la marcha ocurrida el jueves pasado.
El 27 de febrero el caso de María Fernanda cumplió 26 meses de impunidad. Teresa Montes reclama aún que el asesino de su hija no ha sido ubicado y teme que la Fiscalía General del Estado se olvide del caso pues no tiene dinero para pagar asesoría jurídica. “Yo soy madre soltera, yo trabajo y lo único que pido es que hagan su trabajo”. La madre de María Fernanda incluso solicitó al gobernador Rafael Moreno Valle que “atienda los casos”.
En lo que va de 2014 han sucedido 16 crímenes de odio contra mujeres en Puebla, uno de los casos que más estremeció a la sociedad fue el asesinato de Samaí Márquez, quien tenía dos meses de embarazo, y fue presuntamente asesinada por el padre de su hijo Rafael Portillo. Este día el juez le dictó auto de formal prisión a Rafael Portillo por feminicidio por lo que podría tener una sentencia de hasta 60 años en prisión.