Hace 16 años el mundo del alpinismo quedó conmocionado. Uno de los dos máximos exponentes, el estadounidense Alex Lowe, había quedado atrapado bajo la nieve tras intentar escalar el monte Shishapangma (Himalaya). Nunca pudieron encontrar su cuerpo, pero este fin de semana por fin lo hallaron. Congelado, junto a su amigo camarógrafo, David Bridges.
Así lo confirmó su ex esposa Jennifer Lowe-Anker:
“Sus cuerpos fueron hallados cubiertos de hielo, es como si se hubieran congelado en el tiempo”.
Lowe y Bridge desaparecieron el 5 octubre de 1999 mientras intentaban el ascenso al Shishapangma, el decimocuarto pico más alto del planeta.
Ese día fueron sorprendidos por un deslave. La mayor parte del equipo alcanzó a escapar, pero ellos no.
La fama de Alex Lowe
Este escalador nació en 1958 y para la década de los 90 se había convertido en uno de los más destacados montañistas del planeta. Había conseguido subir 10 veces a una de las verticales más peligrosas del mundo: El Capitán, en el parque Yosemite de Estados Unidos.
También era reconocido por su entrega a la hora de ayudar en el rescate de compañeros
Pero buscaba conquistar otro gran objetivo. Llegó a la cima del Everest en dos oportunidades y también en otros dos puntos de más de 8,000 metros sobre el nivel del mar pero él quería subir al Shishapangma, con una altura de 8.027 metros.
“La gente habla del Everest, pero para mí el Shishapangma no sólo es el más bello sobre el paisaje del Tíbet, sino que tiene una mejor ruta para escalarlo, es más interesante”.
-Lowe en el blog MountainZone-
Así que en octubre de 1999 Lowe y su equipo emprendieron el ascenso. En el trayecto crearon dos equipos. Allí fue donde Lowe, Bridge y Conrad Anker fueron por otro lado buscando crear una nueva ruta, pero la montaña se les vino encima.
La mayor parte pudo sobrevivir pero no Lowe y Bridge, quienes fueron buscados por 20 días sin resultados. Quedaron congelados en el tiempo.
Y pasaron 16 años hasta que la semana pasada Conrad Anker -quien se casó con Jennifer, la viuda de Lowe- recibió una llamada donde le dijeron que habían encontrado dos cuerpos encapsulados en un bloque de hielo.
“Me describieron sus equipos y lo que llevaban puesto y a mí ya no me quedó ninguna duda, eran ellos”.
-Anker-
De inmediato se iniciaron las labores para sacar los cuerpos del glaciar y llevarlos de regreso a EE.UU. “Esto es un alivio para mí y para la familia de Lowe y de Bridge que no habían podido enterrar a sus seres queridos”, dijo Anker a la revista Outside.