Tuesday, 19 de March de 2024
Jueves, 26 Febrero 2015 06:52

Policías federales golpearon, robaron y allanaron la vivienda de opositores al gasoducto

Los agraviados interpusieron desde el pasado 8 de febrero una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos y el Comisionado Nacional de Seguridad Pública.

Por : La Jornada de Oriente / Yadira Llaven Anzures

El Centro de Defensa de Derechos Humanos “Joel Arriaga Navarro” denunció este miércoles que el pasado 8 de febrero la Policía Federal ingresó con violencia a la vivienda de una familia de Nealtican, cuyos integrantes están vinculados con el movimiento social opositor a la instalación del gasoducto Morelos, para golpearlos, robarles y amenazarlos de muerte.

Los agraviados interpusieron el mismo día una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos y el Comisionado Nacional de Seguridad Pública.

Destacó que este modo de operar de los agentes policíacos se ha presentado en varios pueblos de la zona del volcán Popocatépetl, que están dentro de la traza del gasoducto.

De acuerdo con la versión de los agraviados, los agentes entraron a las 3 de la mañana, tras abrir la puerta con un ariete y al grito de: “Policía Federal”.

Todos iban uniformados, sometieron a la familia y estuvieron más de 30 minutos en la casa, maltratándolos, exigiéndoles que entregaran las armas y dinero. Cuando se fueron los amenazaron de muerte si los denunciaban”, relató el titular del organismo, Fernando Cuéllar.

El abogado expuso que la Policía de Nealtican, que estaba a una distancia de 5 minutos en automóvil, pues el pueblo es pequeño, llegó después de los 45 minutos. Esto gracias a que el hijo de la familia agredida logró escapar de sus captores.

Precisó que en la esquina de la casa donde la familia fue agredida, hay una cámara de seguridad por la colindancia con una refaccionaria automotriz, pero los agentes arrancaron el artefacto para eliminar toda evidencia.

No obstante, el litigante y defensor de los derechos humanos declaró que fue el mismo municipio el que confirmó después que la Policía Federal ingresó a bordo de dos camionetas.

En entrevista, precisó que la familia violentada no son propietarios de predios afectados por el paso de la obra, sino vecinos solidarios que encabezan la defensa de la tierra y el agua contra el Proyecto Integral Morelos. 

Incremento de la violencia 

Cuéllar aclaró que desde que se instala el gasoducto en Nealtican se ha incrementado la violencia en el lugar y en pueblos vecinos, por la continua presencia del Ejército Mexicano y de la Policía Federal, por lo que advirtió que los pobladores amagaron con crear guardias comunitarias armadas bajo el amparo de leyes comunales.

Hay una situación delicada en las comunidades del volcán, están cansados de la inseguridad, la violencia, los atropellos y que nadie les hace caso; están pensando armarse bajo el amparo delas leyes comunales y alzarse como una autodefensa”, alertó.

Para evitar problemas de ingobernabilidad en el municipio, demandó la presencia de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, con una postura mediadora entre el pueblo y las autoridades.

Los conflictos se acrecentaron desde el pasado sábado, a raíz del ingreso del Ejército y la Policía Federal a un predio que es propiedad del señor Claudio Rosas, en la comunidad vecina de San Miguel Papaxtla, para iniciar a la fuerza la instalación del gasoducto.

Esto provocó que los pueblos vecinos salieran en defensa del campesino, quien interpuso una denuncia ante el Ministerio Público del fuero común en San Pedro Cholula, por el despojo de sus tierras.

A pesar de lo expuesto, Fernando Cuéllar señaló que en Nealtican se viven otros problemas por la cerrazón del alcalde de extracción panista.

Citó que la comunidad le solicitó que el municipio limpiara la fosa séptica del Centro de Salud de la localidad, para ofrecer un mejor servicio, y en lugar de apoyarlos dijeron que el edil pidió que se saque toda la porquería y se tire a las barrancas.

A esto se suma, añadió que durante su primer informe de labores, Domingo Jiménez dijo que ejecutó obras en varias escuelas de nivel básico del municipio, cuando fueron los propios padres de familia los que a través de cuotas lograron realizar adecuaciones en los edificios.

Llamó la atención que durante la protesta que efectuó el declarante frente a la Comisión Estatal de Derechos Humanos, en tres ocasiones pasó una unidad militar sin mayor cautela, mientras observaba las declaraciones del defensor de los opositores al gasoducto.

De los temas expuestos, aseguró que está enterada la CDH y el gobierno del estado, incluido la agresión perpetrada por la Policía Federal.

No estamos inventando nada, planteamos el tema muy puntual a las autoridades; qué están esperando, que la gente haga justicia por propia mano y entremos a una espiral de violencia”, dijo.

La Jornada de Oriente