Friday, 19 de April de 2024
Viernes, 24 Abril 2015 17:33

Consignan a los tres detenidos por trata en hotel del Centro Histórico

El jueves pasado alrededor de 100 sexoservidoras pidieron en una manifestación la liberación de los sujetos debido a que son sólo “empleados de limpieza” de los hoteles donde laboran en la zona de la 14 poniente. Los tres detenidos ya ingresaron al penal de San Miguel.

Por : Edmundo Velázquez / @mundovelazquez , Ciudad de Puebla

Sandra Torija García, Julio César Tepale Mendoza y José Antonio Arellano Morales fueron consignados por la Procuraduría General de Justicia del estado por ser probables responsables del delito de trata de personas en su modalidad de explotación sexual, por lo que ya fueron ingresados al penal de San Miguel y puestos a disposición del Juzgado Primero de lo Penal.

Javier Vázquez Fernández será el juez encargado de llevar los casos de los tres detenidos, quienes fueron defendidos públicamente por sexoservidoras en una manifestación realizada ayer jueves en donde aseguraron que eran “empleados de limpieza”.

Sin embargo, la Unidad Especializada en Investigación de Trata de Personas de la PGJ acreditó que dos de ellos trabajan en labores administrativas y uno más era vigilante del inmueble que funcionaba como prostíbulo en el 310 de la calle 14 Poniente en el Centro Histórico de Puebla.

En respuesta a las sexoservidoras que exigieron la salida de los tres empleados, la PGJ detalló en un comunicado que “la figura del delito de trata de personas en su modalidad de explotación sexual incluye cuando una persona obtiene algún lucro o beneficio económico a través del servicio sexual de otra persona aun cuando las víctimas den su consentimiento para otorgar al explotador parte de su ganancia económica, la ley considera esta acción como un consentimiento viciado”.

El “consentimiento viciado” es la figura legal que se incluye en el código para así persuadir a cómplices del delito de trata a tolerar estas conductas. Se considera “consentimiento viciado” cuando víctima da su consentimiento de forma inconsciente y aunque que en ocasiones es golpeada, amenazada, el explotador aprovecha su vulnerabilidad para convencerla a través del enamoramiento o bajo el argumento de que obtendrá una mejor situación económica.

Con este operativo suman por lo menos 30 prostíbulos cerrados en la calle 14 Poniente desde el año 2012, una de las principales quejas de las sexoservidoras que dicen trabajar por su propia cuenta es que la clausura de inmuebles deriva en quedeban ofrecer sus servicios en la calle y a plena luz del día.